Este año Chevrolet ha ampliado la oferta de productos presentes en nuestro país, sorprendiendo con el debut del Onix junto al músico Jason Derulo. Esto ya vaticinaba que sería un modelo más bien juvenil y urbano. Pues luego de pasar unos días con él, eso queda más que comprobado.

Claro que no se debe confundir juvenil con soledad, porque este hatchback cuenta con un óptimo espacio en su habitáculo que alberga cómodamente a cinco personas. Así, el primer modelo mercosur de la firma del corbatín es ancho y alto, con 1,964 mm y 1,476 mm, respectivamente. Mientras que de largo no anda mal con 3,933 mm y una distancia entre ejes dentro de la media con 2,528 mm. Estas cifras ayudan a que los pasajeros que viajan en las plazas traseras obtengan mayor espacio, siendo un destacable atributo en un vehículo de su segmento. Se asimila a sus rivales en la capacidad del maletero de 280 litros.

La convivencia con el Onix, comienza con una posición de manejo precisa, corregida y alta, lo que permite obtener mayor visibilidad al conducir. Además, los controles al volante, puertas y los del panel central quedan bien ubicados. Lo único que se aleja de la normalidad de la distribución en el interior de un auto, son los mandos de los espejos laterales, que no fueron pensados para la comodidad del usuario.

Con respecto al infoentretenimiento y conectividad del modelo fabricado en Brasil, cuenta con el sistema ya característico de Chevrolet, MyLink, compatible con Carplay y Android, a través de una pantalla táctil de 7” y que integra Bluetooth.

En materia de seguridad, las dos versiones existentes del vehículo de la firma del corbatín, se diferencian sólo porque la tope de línea posee sensor de retroceso. El resto corre para ambas, por lo que incluyen doble airbag frontal, frenos ABS con EBD, jaula de seguridad en habitáculo, inmovilizador antirrobo, entre otros.

El andar del motor de 1,4 litros es destacable y engañador, ya que por sus 97 hp, se presume que podría tener reacción retardada. Sin embargo, al momento de arrancar se siente un empuje que otorga un buen ritmo, sobre todo después de las 2.500 vueltas. Esta marcha se complementa de buena manera con la caja mecánica de cinco marchas, que ofrece relaciones definidas. La dirección eléctrica, en cambio, permite una relajada conducción aunque, a ratos, un tanto imprecisa en sus movimientos; sobre todo en una velocidad mayor.

Según los datos del Ministerio de Energía, el consumo en ciudad del Chevrolet Onix es de 11 km/l. Sin embargo, nos dio 12 km/l, bastante para la exigencia utilizada. Eso sin duda integra el conjunto de atributos con los que cuenta el hatchback y que lo ubican como una buena opción para quienes buscan un auto funcional y cómodo.