SANTIAGO.- El turbo es uno de los inventos que más provecho ha entregado a los fabricantes de vehículos que apuestan cada vez más por los sistemas de sobrealimentación en sus motores para entregar mayor potencia y eficiencia. De ahí la importancia de conocer su funcionamiento y cómo irrumpió en el mercado chileno.
En palabras simples, el sistema opera con una turbina en forma de caracol que utiliza los gases generados por el motor de combustión interna para incrementar su rendimiento. Generalmente viene equipado en vehículos impulsados por diésel, aunque también en los últimos años llegó con fuerza en los gasolineros.
El primer auto con motor turbo fue un Chevrolet Corvair a mediados de los años 60 y de ahí en adelante la industria comenzó a equiparlo en sus vehículos.
El poder del turbo en Chile
La tecnología turbo también irrumpió en el mercado chileno con varios vehículos que presentan el sistema en su mecánica, especialmente los de mayor tamaño como los populares SUV.
Ese es el caso del modelo Santa Fe de Hyundai, que dentro de su oferta presenta el turbo como sistema de sobrealimentación para mover a uno de los modelos más populares de la marca.
La Kia Sorento también tiene esta tecnología dentro de su oferta, mismo caso que el Citroen C4 Cactus y la Mazda CX9, todos dentro del segmento de los SUV.
Pero los vehículos de menor tamaño también entraron en el mercado chileno con sus respectivos motores sobrealimentados. Es el caso del Chevrolet Cruze, un sedán de la marca estadounidense que se convirtió en uno de sus modelos favoritos de los últimos años.
Y como la popularidad del turbo llegó con fuerza al país, ahora incluso existen empresas dedicadas a reparar y vender el sistema de los autos dañados.
Lo que debe tener claro es que la pieza no es barata y puede llegar incluso a costar $700 mil según el modelo del vehículo.
Ventajas de un modelo con turbo
Entre las ventajas de adquirir un vehículo con turbo destaca la ganancia de potencia que presentan los autos y eso se refleja en el “empuje” que se siente en los modelos con turbo.
Además se encuentra el aumento de eficiencia al reutilizar los gases que salen del escape y ser un sistema de sobrealimentación ligero y que ocupa poco espacio.
Por estas razones es que cada vez son más los fabricantes que deciden utilizar turbo en sus autos por sobre otros mecanismos de sobrealimentación del motor.
Desventajas de un modelo con turbo
Pese a las bondades que entrega el turbo, también existen desventajas en su implementación. Una de ellas es el “lag” que se genera, pues se produce un retardo entre que se pisa el acelerador y el turbo logra “empujar” el vehículo.
Además no se puede dejar pasar el tema que generan mucho calor al comprimir tanto los gases de admisión. Por eso se hace necesario, una vez detenido el vehículo, no apagarlo de inmediato para que el turbo se enfríe.
