Hace tan solo dos meses que Audi comenzó la venta de su moderno vehículo eléctrico e-tron en el mercado de Estados Unidos y ya debió emitir una alerta de seguridad que afecta a un total de 540 unidades.
Según explicó el fabricante alemán de vehículos de alta gama el llamado a revisión se resolvió luego de detectar un problema de sellado en el sistema eléctrico que podría derivar en un fatal incendio del vehículo.
Según la declaración oficial emitida por Audi América el problema nace de “un sellado potencialmente defectuoso” que podría permitir que la humedad ingrese al compartimiento de la batería, “lo que podría provocar un cortocircuito o, en casos extremos, un evento térmico”.
En el texto la compañía añade que “el agua puede entrar en el puerto de carga de alto voltaje de los vehículos afectados, abriéndose paso a la electrónica pudiendo provocar un incendio en la batería”.
Mark Dahnke, portavoz de Audi América, añadió a la prensa que en caso de ocurrir tal situación “una luz de advertencia amarilla se activa si los sensores detectan humedad en el sistema eléctrico del e-tron. Si la luz se activa, el vehículo debe estacionarse inmediatamente en un área al aire libre y apagarse. No se debe volver a cargar el vehículo y se recomienda a los consumidores que se comuniquen con la asistencia en carretera de Audi para que remolquen el vehículo”.
A la fecha Audi ya ha comercializado en Estados Unidos un total de 1.109 unidades del coche 100% eléctrico, además de otras 535 que se hallan en los concesionarios como flota de prueba.
El país del norte fue el primer mercado en el mundo en recibir los coches eléctricos del fabricante alemán que intentaba con esta “preferencia” mitigar, en parte, el daño que había dejado en su imagen el polémico caso del “Dieselgate”.