Waymo explica por qué desarrolla vehículos con autonomía total
La empresa estadounidense comenzó probando coches semiautónomos, pero los resultados no fueron los esperados: Los conductores incluso se dormían en el volante.
Waymo es una de las empresas más avanzadas en la tecnología de conducción autónoma y prueba de ello son sus viajes controlados que realiza desde hace unos meses en algunos sectores de Estados Unidos como Phoenix, donde ofrece un innovador servicio de transporte sin conductor que ha recibido buenas evaluaciones.
Sin embargo, la empresa vinculada a Google comenzó su camino en la conducción autónoma de una manera totalmente distinta, realizando viajes en primera instancia con coches semiautónomos.
Fue en el 2013 cuando Waymo decidió entregar su tecnología a un grupo de sus empleados para que realizaran largos viajes en carretera. Los resultados, no obstante, no fueron los deseados por la empresa pero no por alguna falla de los vehículos, sino por el comportamiento de los humanos.
Así lo confesó el CEO de la compañía, John Krafcik, quien reconoció en el Salón del Automóvil de Frankfurt que muchos de los beneficiados por su programa semiautónomo incumplieron las reglas, entre ellas, tener siempre las manos en el volante y prestar atención a la carretera, entre otras.
Por el contrario, un video publicado por la misma Waymo mostró a los trabajadores realizando distintas acciones mientras el vehículo se conducía a altas velocidades por las carreteras estadounidenses.
Enviar mensajes de texto, maquillarse e incluso dormir al volante fueron algunas de las acciones que presenció Waymo durante su experimento, de ahí que decidió cancelar el programa semiautónomo y enfocarse en vehículos completamente autónomos donde no fuera necesidad la injerencia humana.
“Lo que estábamos probando en ese momento era similar a las características de asistencia al conductor de la carretera que ahora están disponibles en los automóviles, donde el automóvil se hace cargo de las partes aburridas de la conducción, pero si ocurre algo fuera de su capacidad, el conductor tiene que hacerse cargo de inmediato”, explicó la firma.
En ese sentido añadió que “lo que vimos fue que nuestros evaluadores confiaron demasiado en esa tecnología. Estaban haciendo cosas como enviar mensajes de texto, maquillarse e incluso quedarse dormidos que dejaban en claro que no estarían listos para manejar si el vehículo se lo pedía. Es por eso que creemos que nada menos que la plena autonomía servirá”.
