Durante muchos años Noruega se mantuvo como el país europeo con mayor venta de vehículos eléctricos siendo un referente para ese continente y el mundo en términos movilidad sostenible. Sin embargo, su hegemonía parece haber terminado ya que los últimos registros indican que Alemania pasó a ocupar el primer puesto en este ítem en el Viejo Continente.
Datos de la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA) indican que en el periodo de enero y noviembre de este año, en Alemania se vendieron 57.533 automóviles electrificados (entre eléctricos enchufables, híbridos, etc), mientras que en Noruega alcanzó los 56.893.
Esa diferencia de 640 vehículos que le permitió a Alemania ubicarse en el primer lugar de la lista europea fue en gran medida por la transición eléctrica que han hecho varias de las empresas automovilísticas de ese país.
Ese es el caso por ejemplo de Volkswagen o BMW, compañías que durante los últimos meses han dado importantes saltos en materia de electromovilidad con una fuerte ofensiva de modelos del segmento verde.
De hecho, la prensa internacional asegura que para el 2023 se espera que los distintos fabricantes alemanes tengan una oferta de al menos 150 modelos eléctricos.
Pese a este nuevo paso, la electromovilidad aún está lejos de las ventas totales de vehículos en Europa y según la ACEA durante el tercer trimestre de 2019 solo el 3,1% de los vehículos comercializados fueron eléctricos.