Alonso aseguró que el motor de su auto es una "vergonzoso".
EFE
SUZUKA.- "Tengo un motor de GP2" gritó por radio Fernando Alonso, doble campeón mundial, incapaz de resistir los asaltos de los debutantes Carlos Sainz Jr y Max Verstappen, este domingo en el GP de Japón de Fórmula 1, disputado en Suzuka, donde terminó en la undécima posición.
Cuando Verstappen, de 17 años, en un Toro Rosso con motor Renault, ni
siquiera el mejor de la parrilla, adelantó fácilmente a Alonso, este
estalló: "Tengo un motor de GP2", la categoría inferior. "Cuando ves que
pilotos nos adelantan, es vergonzoso", añadió más tarde.
El orgulloso español acabó la carrera fuera de los puntos, 11º. Su compañero de equipo, el británico Jenson Button, peor, 16º. En Suzuka, los aficionados japoneses vieron una humillación a Honda en su casa. 25 años después de los títulos de Ayrton Senna y Alain Prost en sus McLaren-Honda.
Estas palabras rápidamente incendiaron las redes sociales, renovando los rumores de una separación a finales de temporada, aunque tenga contrato hasta 2017. Aunque Honda quería a Alonso, le paga más de 20 millones de euros al año, estos no han podido desarrollar un motor acorde con su talento y palmarés.
"Es frustrante, estoy frustrado", explicó el doble campeón del mundo, un poco más calmado, después de la carrera. "Nuestro déficit de potencia nos penaliza. Tengo la impresión de pilotar un coche de otra categoría. Debo mirar sin cesar por los retrovisores. Es muy difícil rodar en esas condiciones", añadió.
Button adelantó el descontento el jueves cuando explicó que había perdido el placer de pilotar su F1: "no me gusta terminar 10º o 14º, no es lo que me apasiona. Ningún piloto está feliz cuando no lucha por la victoria", declaró el campeón del mundo en 2014. A su edad (35 años), está muy interesado como Alonso (34 años), en las 24 horas de Le Mans y el Campeonato del Mundo de Resistencia (WEC).