BOGOTÁ.- En silla de ruedas pero sonriente, el arquero uruguayo Alexis Viera abandonó el miércoles una clínica en Colombia, 37 días después que fue baleado en un asalto frente a su casa.
El ex integrante de América de Cali y en la última época del conjunto Dépor de la segunda división del balompié colombiano perdió la movilidad de las piernas aunque alimenta la esperanza de caminar antes de que concluya el año.
"No me interesa salir en una silla de ruedas... Estoy feliz de ver a mi familia, a mi hija Victoria, a mis padres que vinieron desde Uruguay y no sabían si venían a encontrar a un hijo muerto", manifestó el portero a los medios, a su salida de la Clínica Valle del Lilí de Cali, en el departamento del Valle del Cauca.
Viera fue asaltado por ladrones el 25 de agosto frente a su residencia en el barrio Caney Especial, en el sur de Cali.
"Es una emoción grande, y en diciembre voy a estar caminando porque en la vida no hay imposibles", expresó Viera, de 36 años, quien se sometió a dos intervenciones quirúrgicas en 48 horas.
Posteriormente le fue retirada una esquirla alojada en el omóplato.
Los médicos prevén una recuperación lenta y guardan reservas sobre la posibilidad de que Viera recupere la movilidad total de las piernas.