Esta fue la selección que descolló e hizo madrugar a los hinchas nacionales hace 22 años atrás.
El Mercurio
SANTIAGO.- El Mundial Sub 17 está a la vuelta de la esquina. A sólo días que de que arranque la cita planetaria en nuestro país, es inevitable no recordar la selección chilena que obtuvo el tercer lugar en la cita que se disputó en Japón en 1993.
En dicha Copa del Mundo, la "Roja" dirigida por Leonardo Véliz tuvo un gran desempeño y llegó a semifinales donde quedó eliminada a manos de Ghana por 3-0.
Sin embargo, la escuadra nacional alcanzó el podio tras vencer en penales a Polonia por 4-2, luego de igualar 1-1 en los ochenta minutos.
Y gran responsabilidad en la campaña de Chile tuvieron tres delanteros que por ese entonces hacían sus primeras armas en sus nacientes carreras profesionales: Manuel Neira, Sebastián Rozental y Héctor Tapia.
El trío de atacantes fue fundamental en la Copa del Mundo. Pese a que en el primer duelo ante China Frank Lobos fue el héroe en la igualdad 2-2, en los restantes duelos los mencionados jugadores aportaron con importantes dianas que ilusionaron a todos los hinchas chilenos que madrugaban para ver los compromisos.
En el segundo cotejo ante Túnez, el equipo dirigido por Véliz se impuso 2-0 con goles de Tapia y Neira. Y sus dianas fueron históricas, ya que con esas anotaciones pusieron fin a 43 años sin que un representativo nacional ganara en un Mundial de fútbol fuera de casa.
En el último duelo de la primera fase, la "Roja" dio otra muestra de lucha al remontar un 3-1. Y clave en la recuperación fue Neira, quien con 16 años ya se erigía como una promisoria figura. Un doblete suyo decretó el empate que a la postre le dio al cuadro chileno el paso a los octavos de final.
Goleada para seguir alimentando la ilusión
En la segunda ronda, vino la actuación más brillante del joven equipo. Un contundente 4-1 ante Checoslovaquia, en el que Neira nuevamente se inscribió con dos dianas. También convirtieron Tapia y Rozental.
Todo iba miel sobre hojuelas para los juveniles. Chile llegaba con la moral a tope para el cotejo ante Ghana, por ese entonces vigente monarca de la categoría.
La escuadra ratificó su cartel de favorito y enterró la ilusión nacional con un claro 3-0.
Finalmente, el destino fue dispar para los tres: Neira alcanzó notoriedad en el fútbol chileno con la camiseta de Colo Colo y Unión, pero nunca pudo ratificar su calidad en el fútbol extranjero.
Por el lado de Tapia, su destape fue más tardío, pero sí logró tener cierto éxito en Europa, con la camiseta del Lille de Francia.
Y el caso más emblemático lo marcó Rozental. Fue vendido en US$ seis millones de la época en 1996 al Glasgow Rangers, pero en Escocia sufrió una gravísima lesión que nunca le permitió retomar el espectacular nivel que mostraba en canchas nacionales.
