El francés de 60 años, presidente de la UEFA, era el máximo favorito para hacerse con el sillón presidencial de la FIFA hasta hace un mes, pero su situación se complicó con su suspensión provisional de 90 días por sospechas de corrupción. Sólo si consigue limpiar su nombre y recuperar la credibilidad a tiempo podrá volver a ser una opción. Las vagas explicaciones que dio sobre por qué recibió dos millones de francos suizos de Blatter en 2011, justo cuando el suizo optaba a la reelección, complican mucho su situación.
El italo-suizo de 45 años es el plan B de la UEFA. Secretario general del ente europeo, la mano derecha de Platini se presentó en el último momento con el apoyo del comité ejecutivo de la organización y con una imagen de hombre recto y competente. Políglota y empático, Infantino podría retirar su candidatura si Platini pudiera finalmente concurrir a las elecciones.
El jeque de Bahrein es otro de los grandes favoritos al triunfo, pese a las duras acusaciones por parte de asociaciones de defensa de los derechos humanos de haber participado en la violenta represión de la oposición política, incluidas torturas a deportistas. En realidad, el candidato de 49 años era aliado de Platini, pero la inhabilitación del francés lo llevó a presentarse él mismo. Todavía no publicó su programa, pero aseguró que en caso de ganar no cobrará nada.
Entre todos los demás está este sudafricano de 62 años. Luchador contra el apartheid y compañero de prisión de Nelson Mandela, el africano se perfila también como un candidato fuerte. Sexwale quiere presentarse esta semana en Egipto ante las federaciones del continente. Para el candidato, la actual situación del organismo mundial es "una pesadilla". "De la FIFA se dice que es la organización criminal más grande del mundo", lamentó.
El príncipe jordano fue el único que desafió a Blatter en las elecciones de mayo, cuando el escándalo de corrupción desatado por la fiscalía de Estados Unidos empezó a corroer los cimientos de la FIFA. Llevó la votación a una digna segunda vuelta, aunque se retiró antes de que fuera necesario votar. Entonces contó con el apoyo del bloque opositor europeo, algo que parece imposible en esta ocasión. Además, perdió su posición de poder en el ejecutivo en favor de Al Khalifa.
El francés de 57 años trabajó en el seno de la FIFA de 1999 a 2010 y llegó a ser director de relaciones internacionales y vicesecretario general. Desde entonces, es asesor de pequeñas federaciones como Palestina. Hombre cercano a Blatter, es uno de los candidatos con el programa de gobierno más elaborado y el primero en proponer debates. No cuenta, sin embargo, con el apoyo de ninguno de los grandes bloques de votos.
El presidente de la Federación de Liberia tiene dificultades incluso para lograr votos en África. Él asegura que tiene el apoyo de 25 federaciones, pero parece un candidato sin posibilidades de pelear el trono.
"He depositado oficialmente mi candidatura. Soy muy optimista respecto a mis oportunidades para ganar y me comprometo a llevar a cabo cambios positivos", declaró.
Para la elección del presidente se necesitan las dos terceras partes de los miembros presentes con derecho a voto. Si ninguno de los candidatos la consigue se acude a una segunda vuelta.
En esta etapa es necesaria la mayoría simple de los votos válidamente emitidos (más del 50%), si ninguno de los candidatos la consigue se realizarán los procesos de votación necesarios hasta que alguien lo logre. Si hay más de dos candidatos postulando al cargo de presidente, se eliminará después de cada votación a quien obtenga el menor número de preferencias.
Votos por confederación