Mala jornada para el camarín albo.
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SANTIAGO.- Fue un revés inesperado. En Colo Colo existía ilusión en partir con el pie derecho su participación en la Copa Libertadores, pero finalmente esa esperanza se hizo añicos.
El equipo de Pablo Guede cayó ante Atlético Nacional en un duelo en el que no se vio el fútbol vistoso que prometen sus nombres y que generaron una alta expectativa en la previa a su estreno internacional.
Por lo mismo, la frustración se apoderó de los jugadores una vez concluido el encuentro frente a los verdolagas.
El único jugador que habló fue Agustín Orión, quien por protocolo tuvo que asistir a la conferencia de prensa junto a Guede.
"Se jugó un partido muy luchado e intenso. Nos faltó hacer daño, pero quedan aún cinco partidos", opinó el arquero argentino.
¿El resto? Nada. Cada uno de los futbolistas salió raudo con sus automóviles, acompañados por sus familiares y seres cercanos. No había ganas de hablar. El resultado remeció por completo al plantel.
Dolor que también sintió el presidente Aníbal Mosa, quien no ocultó su amargura luego del revés ante la escuadra de Medellín.
"Esto es la Copa Líbertadores. Ahora toca dar vuelta la página y hay que seguir trabajando", manifestó el timonel del club de Macul.
Una caída que dolió en Pedrero, pero que de ninguna manera hipoteca las opciones albas en el torneo. Quedan cinco duelos y el equipo de Guede aún puede mejorar. Lo cierto es que el Cacique debe dar con la tecla a tiempo...
