SANTIAGO.- En enero de 2019, arribaba al aeropuerto de Santiago el delantero chileno Ramsés Bustos. Surgido de las divisiones menores de la Unión Española y miembro del plantel de la selección Sub 20 del 2011 del Sudamericano de Perú, el "Faraón" llegaba al país luego de casi dos años en el exótico fútbol de Tailandia.
En busca de nuevas oportunidades en el balompie nacional, Bustos lleva cerca de cuatro meses entrenándose de manera personal, yendo a ver a su querida Unión cada vez que puede y disfrutando de su familia.
La llegada del delantero a Chile fue algo casi improvisado. Aún tenía contrato en su equipo, el Super Power FC. Sin embargo, fue parte de un duro momento en su club, club que ya no existe. ¿Por qué?
Según contó a Emol, lo que le tocó vivir en Tailandia fueron partidos arreglados, apuestas ilegales y un presidente que arrancó.
Super Power FC
Bustos surgió de la Unión Española, pero nunca se afirmó en ese lugar. Incluso, en 2013 llegó la posibilidad de irse y aceptó. Fue su primera incursión en el fútbol de Tailandia. Y ha sido de lo mejor que le ha pasado en su carrera.
Bustos en el Buriram United, 2013.
Fichó por el Buriram United, fue campeón y llegó hasta los cuartos de final de la Asia Champions League, algo impensado para un equipo de ese país.
Sin embargo, no llegó a acuerdo para continuar y volvió al país. Deambuló por equipos de la Primera B hasta que Tailandia volvió a llamar a su puerta.
"En 2016, cuando yo estaba en Valdivia, me escribió por Facebook un agente tailandés, preguntando qué era de mí, cómo estaba, que se acordaba...Y si tenía la intención de volver a jugar allá. Le dije que sí", cuenta Bustos.
La oportunidad se hizo realidad. Fichó en el Nongbua Pitchaya de la segunda división tailandesa y tuvo buen cometido. Volvió a los pastos que lo enamoraron cuando defendió la camiseta del Buriram.
Pero lo peor vino después. En 2018 y tras una buena temporada en el Nongbua, fue transferido al Super Power FC. Un recuerdo para el olvido. Algo que el "Faraón" quiere borrar de su mente.
El chileno en el Nongbua Pitchaya, 2017.
En el Super Power, Bustos vivió lo peor que le ha tocado en su carrera.Según cuenta, le quedaron debiendo tres meses de sueldo y como el club quebró y dejó de existir, no tiene a quién cobrarle. Así lo explica él.
"En ese equipo eran mafiosos. Estuvimos en una racha de como ocho partidos seguidos que perdimos, y era muy raro, íbamos perdiendo 1-0, y en los últimos 10 minutos nos hacían 4 goles. Al principio yo no me daba cuenta, pero después empecé a escuchar rumores de otros compañeros sobre lo que estaba sucediendo. Me puse a prestar atención y en verdad era muy notorio", comienza contando el delantero.
"Se estaban dejando perder por apuestas ilegales. Había un jugador de Laos, que era central y el dueño del equipo coincidentemente era de Laos. Era muy malo ese central y jugaba todos los partidos de titular. Me di cuenta que sus actitudes a la hora de jugar y marcar no eran de un jugador profesional", continúa Bustos, con clara molestia.
"Sus actitudes a la hora de jugar y marcar no eran de un jugador profesional"
Ramses Bustos
En esa temporada, eran cuatro los extranjeros en el plantel del Super Power. Un brasileño, un ruso, el central de Laos y el chileno. Incluso, el "Faraón" cuenta que esto llegó a la televisión tailandesa y fue un verdadero escándalo.
"Se comentó en varias partes, después salieron videos comentando las jugadas, fue algo muy polémico lo que sucedió", recuerda.
Y además, en un momento fue tan evidente, que casi termina en golpes. Ahí fue cuando se dieron cuenta de todo.
El "Faraón" defendiendo la camiseta del SuperPower.
"Entre nosotros fue tan notorio, que los tailandeses le querían pegar a este jugador de Laos, luego de una jugada muy asquerosa donde se dejó hacer un gol en el último minuto. Lo encararon los mismos tailandeses y le querían pegar. Después de ese día, él no se volvió a presentar nunca más a los entrenamientos. No volvió nunca más al equipo".
En el Super Power, Bustos jugó 15 partidos, 10 como titular. Marcó solo dos goles, lo que redondea una campaña para el olvido. Para peor, manifiesta que no pudo cobrar los últimos tres meses de sueldo.
"Nos enteramos que el presidente era de Laos también, que sacó la plata del equipo y por eso no nos pagaron más los sueldos. Estaban haciendo negocios, era una mafia...Cuando los descubrieron, arrancaron", narra con un dejo de decepción.
"Podíamos perder y la gente nos aplaudía igual, va más allá del fútbol"
Ramses Bustos
Sin embargo, Bustos no se resignó tan fácil y acudió a la Federación tailandesa, pero no había a quién cobrarle porque el club desapareció. El Super Power quebró. Se esfumó, y con ello, la retribución del trabajo de más de 20 futbolistas.
Sin embargo, y puede parecer increíble, el chileno no guarda rencor y afirma que volvería a jugar en el país asiático.
"Sin duda volvería a jugar y vivir en Tailandia. Estar con mi familia allá fue una experiencia muy linda. Tuve mala suerte de estar en ese equipo, pero la liga, organización, los estadios, la gente, era buena. Pasaba que podíamos perder y la gente nos aplaudía igual, va más allá del fútbol".
Bustos en la Unión Española, 2014.
La actualidad del "Faraón"
Bustos está en Chile desde enero de este 2019. El delantero se encuentra esperando la mitad del año para ver sus posibilidades de fichar en algún equipo cuando se abra la ventana de transferencias.
Consultado por si ya posee algún ofrecimiento, el jugador es sincero: "Tuve una oferta concreta de Canadá, pero al final no se dio. De Chile no tengo nada todavía".
El atacante, con pasados en Unión Española, Barnechea, Deportes La Serena, Deportes Copiapó y Deportes Valdivia en Chile, busca volver a tener ese amor por el fútbol, ese que perdió en el Super Power.
Le encantaría volver a la Unión, cuenta. Pero él sabe que esa chance está más lejos que cerca. "Tal vez en un futuro", sentencia.