SALVADOR.- Minuto 39. Chile y Ecuador empatan 1-1 por la Copa América cuando un pelotazo largo obliga a Gabriel Arias a salir del área para evitar el peligro. En ese momento comienza todo.
Un jugador rival queda en el piso reclamando una infracción, aunque el arbitro argentino, Patricio Loustau, desestima cualquier falta. Eso al menos en la primera instancia.
Tras determinar saque de fondo a favor de la "Roja", el juez pide a Arias que frene la salida. Se lleva la mano al oído y comienza a escuchar la palabra del colombiano W
ilmar Roldán, encargado del VAR. A esa altura el reloj ya marcaba los 41'.
Tras unos momentos de espera y tensión, Loustau inicia lentamente una caminata hacia el borde de la cancha hasta que a los 42' levanta sus manos señalando que iba a revisar las imágenes.
Mientras eso pasaba Gary Medel conversaba con el juez de línea y le explicaba que no había falta. Por su parte, Rueda realizaba lo mismo con el cuarto árbitro. La banca chilena también ejercía presión cuestionando el uso del VAR, bastante bullado en esta copa.
A esa altura la pifiadera en el Arena Fonte Nova ya era monumental y cada vez más fuerte debido al largo tiempo tomado por el referí para tomar una determinación.
Pero tras cinco minutos desde el inicio de la controvertida jugada y cuando el reloj ya marcaba los 44', el árbitro volvió a la cancha y sancionó falta de Arias. Además le puso tarjeta amarilla.
La decisión provocó la molestia de la banca chilena,
que encabezada por Nicolás Castillo y Brayán Cortés, cuestionó el dictamen de Loustau.
Al lado contrario no fue distinto.
La delegación ecuatoriana y su técnico, Hernán "Bolillo" Gómez se fue contra el cuarto juez pidiendo la tarjeta roja. Los reclamos fueron fuertes, pero rápidamente bajaron el tono ante la advertencia del colegiado de sacar tarjetas.
Al final fue una larga espera y que puso en duda si merecía o no el uso del VAR. Lo cierto es que una vez más demoró demasiado alargando las críticas surgidas en esta copa.
"Se demora, es algo que ya ha pasado en otros partidos, eso no es bueno por los tiempos que se está demorando, pero a la larga hace justicia y eso es lo que vale", sostuvo José Pedro Fuenzalida.