La que fuera N°1 del mundo Simona Halep, suspendida desde el pasado mes de octubre después de haber dado positivo por roxadustat, una sustancia prohibida, explicó este jueves en una entrevista a Tennis Majors haber sido víctima de
"contaminación a través de uno de sus complementos alimenticios".
Halep está viviendo una verdadera pesadilla. Desde sus palabras se desprende la desesperación que vive. "No pido un trato especial, Sólo quiero ser juzgada: ¿cuánto tiempo tengo que esperar aún?", dijo, casi suplicando para que su caso se resuelva cuanto antes.
Su defensa
Varios expertos a los que recurrió la tenista de 31 años "establecieron que esas trazas eran resultado de una contaminación de uno de mis complementos alimenticios, lo que explica la muy pequeña cantidad que fue detectada en mi cuerpo", declaró Halep.
La rumana, ganadora de Roland Garros en 2018 y de Wimbledon en 2019 dio positivo en agosto de 2022 en Nueva York por roxadustat, una sustancia prohibida clasificada entre las EPO según la reglamentación de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA).
Unos meses más tarde, fue suspendida por la organización antidopaje del tenis (ITIA) y se expone hasta a cuatro años de suspensión.
"Nunca he consumido, conscientemente, el menor producto prohibido", respondió al ser preguntada si tomó roxadustat, molécula que estimula la producción de glóbulos rojos y generalmente es utilizada en el tratamiento de la anemia ligada a las enfermedades renales.
Halep es la primera jugadora de primer plano en verse entre las redes del antidopaje desde la mediática suspensión de Maria Sharapova en 2016. Tras dar positivo en meldonium, la estrella rusa recibió finalmente una suspensión de quince meses.
"Nunca habría pensado poder verme inmersa en una historia de este tipo", prosiguió este jueves una desesperada Halep, afirmando sentirse "bien" ya que "sé que estoy limpia".
En relación a los peritajes realizados, la rumana añade que la Federación Internacional de Tenis (ITF) rechazó sus pruebas. Halep pidió así ser "escuchada por un tribunal independiente".
Pero varias audiencias habrían sido aplazadas o anuladas por la ITF. Una petición de levantamiento provisional de su suspensión fue asimismo rechazada.
Durante su suspensión provisional la rumana no puede participar en ningún torneo. Sin embargo afirmó que aún desea jugar, y sentirse "tan fuerte como antes, o más".