Una jugada realmente de locos. Morelia le ganaba 2-1 al Celaya en el ascenso mexicano. Guillermo Allison, arquero del Celaya, va a buscar el cabezazo en un tiro de esquina a favor con la ilusión de empatar el duelo.
El propio Allison cabeceó,
pero atajó el portero rival, Santiago Ramírez.
Ramírez no titubeó y al ver el arco de enfrente desprotegido, agarró el balón y le dio fuertísimo desde su área.
La pelota lentamente se incrustó en la portería para un gol verdaderamente impresionante.
El tanto decretó el 3-1 final para el delirio de los comentaristas y de las miles de personas presentes.
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