Chile será sede de la Copa del Mundo Sub 20 de 2025. La FIFA lo confirmó este domingo.
El país ya organizó un Mundial masculino de la categoría. Fue en 1987. El equipo nacional fue dirigido por Luis Ibarra y en el plantel había varios futbolistas que con el paso de los años brillarían en el profesionalismo: Javier Margas, Luis Musrri, Fabián Estay, Raimundo Tupper, Juan "Candonga" Carreño o Pedro González.
El Mundial se disputó entre el 10 y el 25 de octubre. Hubo cuatro sedes: El Estadio Regional de Antofagasta, Playa Ancha de Valparaíso, el Nacional de Santiago y el Ester Roa Rebolledo de Concepción.
Participaron 16 selecciones y se dividieron en cuatro zonas. El elenco nacional quedó en el Grupo A. En el debut perdió 4-2 con la poderosa Yugoslovia de Mirko Jokic.
Pero Chile se recuperó. En el segundo partido goleó 3-0 a Togo con doblete de Luka Tudor y un tanto de Camilo Pino. Luego se impuso a Australia por 2-0 con Pino de goleador y aseguró la clasificación a cuartos de final.
En la siguiente fase, tocó un rival de alto tonelaje: Italia. El duelo se disputó en Concepción.
Un penal de Pino hizo la diferencia. Chile ganó 1-0 y avanzó a semifinales. A esa altura era la gran revelación del certamen.
Sin embargo, en la fase de los cuatro mejores no pudo con Alemania Federal. Perdió 4-0. Marcel Witeczeck, a la larga máximo artillero del Mundial, tuvo una tarde inspirada.
Tras esa dura derrota, la "Roja" debió enfrentar el partido por el tercer puesto y cayó por penales con Alemania Democrática.
La Yugoslavia de Mirko Jozic
El entrenador que años más tarde fue campeón de la Copa Libertadores con Colo Colo comandó a una brillante generación yugoslava.
Tenía un cuarteto ofensivo de ensueño: Robert Prosinecki, Zvonimir Boban, Davor Suker y Predrag Mijatovic.
En la fase de grupos, el equipo de Jozic ganó sus tres partidos. Hizo 12 goles y solo recibió tres en contra.
En cuartos eliminó a Brasil, campeón del Mundial anterior, en semis a Alemania Democrática y en la final sufrió para vencer por penales a Alemania Federal.
A Colo Colo le gustó mucho el fútbol ofensivo desplegado por Yugoslavia y decidió apostar por Jozic. En diciembre de ese año el DT llegó a Macul para trabajar en series menores.
"Mi trabajo se centrará en los niños. No tengo otro propósito", afirmó.
Poco tiempo después regresó a su tierra porque extrañaba a su familia, pero en 1991 nuevamente vino a Chile. Se hizo cargo del primer equipo de Colo Colo y consiguió dejar una huella indeleble.