"Es muy duro. Era un objetivo importante que tenía, no voy a mentir. Estuve muy decepcionado y lo sigo estando. La he pasado muy mal porque quería estar sí o sí. Así es el deporte. He tenido momentos difíciles con el físico y bajones de ánimo por no poder competir como quiero, y obviamente eso trae consecuencias, como no estar en París. Intento seguir adelante, seguir trabajando", dijo en conversación con Clay Magazine.
Sobre su ausencia en la cita de los cinco anillos en Japón, señaló que "Tokio fue difícil, siento que ahora que pasó el tiempo me arrepiento de no haber ido. Pero era un momento muy difícil, la gente que me conoce sabe que me costaba mucho viajar, todos los días tests de COVID… no me sentía bien".
"Estaba con Franco (Davín, su coach) en ese momento y me decía que no me veía bien de energía. Fue un torneo difícil, se bajó más de la mitad del cuadro. Obviamente era en plena pandemia. Fueron muchas las razones", recordó. "Ahora me arrepiento de no haber ido, pero uno comete errores. El tenista tiene que tomar muchas decisiones y algunas salen mal. Me arrepiento, pero tampoco me jode tanto. Asumo las consecuencias y sigo adelante", añadió el "Tanque", que pretende jugar en Los Angeles 2028: "Eso espero. Voy a tener 32 años. Espero jugar".
Su actualidad y duras críticas a la Copa Davis
Por otro lado, consultado sobre su actualidad en el circuito, Garin ve con optimismo lo que viene en 2024.
"En Londres sentí alivio al haber pasado una qualy difícil (en Wimbledon). Aunque lo que me pone más contento es que estoy sano de físico después de varios meses. Creo que estoy de a poquito recuperando el nivel que tenía hace un año y medio antes de las lesiones", consideró el dueño de cinco torneos ATP.
Al momento de hablar de la próxima Copa Davis, en la que Chile jugará ante Alemania, Estados Unidos y Eslovaquia, el nortino se desahoga y califica este esto como un "desastre".
"Hace tiempo que siento que la Copa Davis perdió lo que era. Las veces que hemos jugado en Chile jugamos con el estadio lleno y un ambiente increíble. Siento que nunca voy a poder jugar el Grupo Mundial en mi país. Ahora nos ponen en China… He jugado miles de torneos en China y nunca hay nadie. No habrán espectadores. No sé cuál es la razón de ir ahí, debe ser una razón económica", lamenta.
Finalmente, de la imagen que siente tener en Chile, el tenista indica que "obvio que hay gente que valora mucho lo que he hecho, viniendo de un país en donde la federación prácticamente no existe, y los tenistas salimos con el puro esfuerzo familiar. Hay gente que no respeta y te insulta, te critica, y no sabe sobre tus problemas reales, pero yo intento quedar con lo positivo, con lo bueno, y soy feliz con eso".
"Ahora que estoy un poco más grande me doy cuenta de lo difícil que es llegar a dónde llegué. Estuve arriba, ahora que me tocó bajar veo otras realidades. A veces el trato de los torneos a los jugadores no es bueno, y me ha tocado vivir esa parte últimamente", completó.