La polémica en el tenis mundial está más que encendida.
Emol/Agencias
El viernes pasado se dio una de
más grandes polémicas del último tiempo en el tenis mundial. Fue en
el Masters 1.000 de Cincinnati entre el británico Jack Draper y el canadiense Félix Auger-Aliassime, en el duelo de octavos de final.
El juez de silla
Greg Allensworth dio como bueno un punto de Draper que significó el triunfo sobre Auger-Aliassime, pese a que la pelota había dado dos botes antes de que el británico golpeara la pelota.
Varios jugadores reaccionaron a lo ocurrido en Cincinnati, con duras críticas a Allensworth por su cometido.
Por ejemplo, el polémico australiano Nick Kyrgios dijo que "está muy claro que este árbitro nunca ha golpeado más de dos bolas sobre la red en su vida. Es vergonzoso". Y en X (ex Twitter) reclamó: "Decisión horrible, pero todos los jugadores saben exactamente dónde golpeaste la raqueta, son cosas ridículas".
Mientras que el griego Stefanos Tsitsipas (11°) indicó "creo que nunca he visto un tiro como este", agregando un video del golpe de Draper.
Más allá llegó el compatriota de Auger-Aliassime, Denis Shapovalov (105°) posteó un emoticon de un circo y un payaso en X. Y allí había historia detrás, porque el zurdo fue descalificado por este mismo juez hace una semanas por un "berrinche" ante Ben Shelton en Washington.
Pero el que provocó un verdadero terremoto fue Novak Djokovic, quien en la red social de Elon Musk, planteó un debate más profundo luego de este escándalo.
"Es vergonzoso que no tengamos una repetición en video de este tipo de situaciones en la cancha. Lo que es aún más ridículo es que no tenemos la regla que permitiría a los jueces de silla cambiar la decisión original basándose en la revisión en video que se realiza fuera de la cancha", señaló el actual campeón olímpico.
En esa línea, el ex número uno del mundo agregó que "todos los que miran televisión ven lo que sucedió en la repetición, pero los jugadores en la cancha se quedan en la 'oscuridad' sin saber cuál es el resultado".
"Tenemos el 'Hawkeye' (ojo de halcón) para las decisiones de línea, vivimos en el siglo XXI, estamos tecnológicamente muy avanzados. Por favor a los Tours respectivos, asegúrense de que esta tontería no vuelva a suceder", cerró.
El mensaje de Novak Djokovic
Cómo funciona el "ojo de halcón" y lo que viene en el US Open
La situación provocó el pedido de modificación del "ojo de halcón", que actualmente solo revisa si la pelota está dentro o fuera de las líneas reglamentarias para determinar si es buena o mala.
Sobre lo ocurrido con Draper y Auger-Aliassime no hay potestad, no puede determinar si hubo doble pique o no. Por eso, a la voz de Djokovic se sumaron otros protagonistas pidiendo nuevas facultades para revisar jugadas en el tenis.
Michael Russell, ex jugador estadounidense y actual entrenador de Taylor Fritz (12°) planteó: "¿Podemos implementar la revisión de videos? Los torneos ya cuentan con esa capacidad".
Mientras que el histórico Brad Gilbert, ex coach de Andre Agassi y que ahora trabaja con la norteamericana Coco Gauff, también se sumó a esa postura: "El hecho de que el árbitro llegue a la cancha sin mirar el video de la jugada es más que desconcertante, lo que confirma que la decisión de los árbitros es escandalosa. Este es un ejemplo perfecto de 10 segundos que los árbitros tienen el monitor de televisión hacen obvia la anulación de la jugada".
Por su lado, Darren Cahill, entreandor de Jannik Sinner, uno del mundo, sentenció: "Por favor, hay que implementar un sistema de desafío de video. Lo tenemos y hay que usarlo".
¿Cómo será la situación en el US Open? La USTA (Asociación d Tenis de Estados Unidos) ampliará el uso de la revisión de vídeo en el último Grand Slam del año.
Tras usarlo en cinco canchas para el cuadro principal en 2023, el sistema de revisión estará disponible en ocho en 2024, sumando las canchas 7, 11 y 12 al Arthur Ashe, Louis Armstrong, Grandstand, cancha 17 y 5.
A través del sistema, los jugadores reciben tres desafíos por set para cambiar una decisión, más uno para los tie breaks.
Una vez que se inicia un pedido de revisión, se envía a la sala de revisión de videos de la USTA que le transmite ángulos de cámara al juez de silla de la cancha a través de una tablet. Luego, el umpire revisa las imágenes en busca de pruebas claras para anularlas y toma la decisión final.
La polémica de la tecnología está más viva que nunca en el tenis.