TOKIO.- El Banco de Japón mantuvo el viernes su programa de estímulo y su evaluación optimista de la economía, señalando su convicción de que el crecimiento se fortalecerá lo suficiente para acelerar la inflación a su objetivo de un 2 por ciento sin una relajación adicional de la política monetaria.
Los mercados se están centrando en lo que el gobernador del Banco de Japón, Haruhiko Kuroda, dirá en una sesión informativa posterior a la reunión sobre el mérito y la desventaja de un yen más débil, que se está convirtiendo en un tema políticamente sensible.
En momentos en que la confianza empresarial mejora y el gasto de capital se fortalece, el Banco de Japón (BOJ, por su sigla en inglés) mantuvo su evaluación optimista de que la economía continúa recuperándose.
Como se esperaba, el banco central también mantuvo intacto su compromiso de aumentar la base monetaria a un ritmo anual de 80 billones de yenes (650.000 millones de dólares) a través de compras agresivas de activos. La decisión fue tomada por un votación de 8-1.
"Las exportaciones están repuntando y el gastos de capital está aumentando moderadamente como una tendencia, al tiempo que los ingresos corporativos mejoran", dijo el BOJ en un comunicado.
También revisó al alza su evaluación en la inversión en vivienda que decir que "parecía estar rebotando".
El mes pasado, dijo que la inversión en vivienda estaba tocando piso con algunas señales de un rebote.
