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Santiago: Sábado 23 de noviembre del 2024 | Actualizado 02:07
Una de las principales preocupaciones del mundo es si China será capaz de mantener la tasa de crecimiento y así no perjudicar al resto de los países, en especial los productores de commodities. En ese sentido, afirmaron que la expansión no bajará de 6,5% en los próximos cinco años y así cumplir con el objetivo de doblar el PIB y la renta per cápita de 2010 para el año 2020. "Mantener un nivel medio-alto de crecimiento garantizará la mejora del nivel de vida de los ciudadanos, para que puedan beneficiarse verdaderamente del éxito del país", dijo el Presidente Xi Jinping. Para este año proyectan un 7%.
Establecerán un mercado de capitales transparente y sano. Entre lo más destacado figura un mecanismo de emisión y transacción de acciones y bonos, estimular la financiación directa y bajar la tasa de endeudamiento. Se prevé que incrementarán la competencia en sectores como telecomunicaciones, finanzas, petróleo, electricidad, transportes y servicios. Modernizará a las empresas estatales promoviendo la propiedad mixta y la entrada de capital privado, de forma que "puedan ser independientes y responsables de sus beneficios, pérdidas y riesgos".
China seguirá apuntando a lograr que el FMI incorpore su moneda nacional en la canasta de monedas del organismo. Esto le permitirá, por ejemplo, bajar los costos de los préstamos y facilitar la expansión extranjera de las compañías chinas. También que los precios de los contratos de las principales materias primas se fijen en yuanes en vez de dólares, además de abrir la posibilidad de que una parte de las enormes reservas de divisas extranjeras de China se puedan redistribuir en direcciones más productivas a nivel económico.
El Gobierno aseguró que terminarán con la pobreza en los próximos cinco años y se comprometió a poner en marcha políticas que consigan que los 70 millones de personas que en el país viven aún bajo el umbral de la pobreza, con ingresos de menos de un dólar al día, salgan de esa situación antes del final de esta década.
Ajustar el sistema de distribución de ingresos y buscar reducir las brechas es también uno de los objetivos prioritarios de este plan. Intentarán aumentar "significativamente" los ingresos de la población con rentas bajas y elevar la proporción de los de ingresos medios, así como acelerar el establecimiento de un sistema de impuestos sobre la renta más integral. También regularán los ingresos "negros", que es obtenido de fuentes desconocidas. De acuerdo con las estadísticas locales, el índice Gini cayó por seis años consecutivos a 0,469 en 2014, lo que supone una brecha de ingresos relativamente grande.
Comprometieron encauzará la tradicional industria manufacturera por una vía "respetuosa con el medio ambiente", con la creación de un sistema de producción circular. Esto quiere decir que sea una producción sustentable, que genere empleo y crecimiento. El objetivo es reducir las emisiones de carbono en las principales compañías, incentivar la actualización de la tecnología, fomentar la energía limpia y el transporte verde.
