BUENOS AIRES.- Inflación, tipo de cambio y reservas monetarias se cuentan entre las urgencias de la economía argentina que deberá enfrentar el Presidente electo Mauricio Macri y
su Gobierno, a partir de su asunción el 10 de diciembre.
Política cambiaria
Macri señaló durante la campaña que si asumía la Presidencia eliminaría de inmediato el llamado "cepo cambiario", que autoriza la compra de dólares sólo a pequeños o medianos ahorristas que justifiquen sus ingresos.
Inflación
El Presidente electo ha dicho que el problema principal de Argentina es la inflación, situada entre el 20% y el 30% anual según consultoras privadas. Analistas económicos del oficialismo saliente han planteado que si se libera el mercado de cambios, sería difícil evitar un shock inflacionario. Macri indicó que las medidas promercado facilitarán el control de los precios.
Reservas
Las reservas del Banco Central no han cesado de bajar y se ubican en poco más de US$ 25.000 millones, tras los pagos de un bono por 6.000 millones y otra suma similar de venta a ahorristas en los últimos meses. Macri aseguró que apelará a las divisas que ingresen exportadores agrícolas que aún no venden sus cosechas. Para estimularlos, prometió bajarles impuestos.
Pleito con "fondos buitre"
Otro asunto a afrontar es la resolución del conflicto con los fondos 'buitres' (especulativos) en una corte de Nueva York, por una deuda de US$ 1.600 millones. En su primera rueda de prensa, Macri dijo que piensa solucionarlo pero que no está entre sus prioridades inmediatas.
Subsidios
Los grupos económicos y sus consultoras consideran que se deben reducir o eliminar los subsidios a las tarifas de servicios públicos, en transporte, electricidad, gas y agua potable debido a su peso en el gasto público. El Mandatario electo sostuvo el lunes que corregirá las tarifas "gradualmente". "Me comprometí a un sistema de tarifas justo", indicó.
Estadísticas
Otro problema crucial que planteó el triunfador de las elecciones del domingo es el de recuperar la confianza en las estadísticas estatales que maneja el instituto INDEC, intervenido desde 2007 por los gobiernos kirchneristas. Argentina llegó a un acuerdo técnico con el Fondo Monetario Internacional para mejorar la metodología. Sin embargo, consultoras privadas afirman que el dato de inflación aún no es confiable. También debería ser restituido el cálculo de la pobreza, que el gobierno dejó de suministrar.