SANTIAGO.- El subsecretario de Hacienda, Alejandro Micco, estuvo preparándose en los últimos seis meses para la próxima semana.
El proyecto de ajustes a la reforma tributaria ingresará probablemente el miércoles 9 a la Cámara de Diputados y propondrá simplificaciones en tres temas centrales: impuesto a la renta, IVA a la vivienda y la norma general antielusión.
En entrevista con El Mercurio, la autoridad afirmó que "este sistema tributario va a ser el que nos va a regir para las próximas décadas", destacando que "el nuevo sistema tiene que ser progresivo y que hay que evitar la evasión y la elusión".
"Todas las conversaciones que hemos tenido con todos los sectores fueron tomando en cuenta esos tres puntos. Hay un cierto consenso, lo que hace mucho más fácil la conversación ahora, porque nos centramos en temas bastante más puntuales y técnicos. Los diálogos con los distintos grupos han sido mucho más productivos", reconoció Micco, luego del diáologo realizado este año con las distintas ramas productivas del país.
Consultado por las criticadas realizadas por Sebastián Piñera, al decir que "el próximo gobierno le tocará reconstruir Chile de desastres provocados por la Nueva Mayoría", el secretario de Hacienda aseguró que "el tema es que aprendimos con dolor que las cuentas fiscales tenemos que mantenerlas ordenadas, y dado el gasto que se está haciendo en reformas importantes, estructurales, como son la de educación y mayor inversión en salud, estoy seguro de que ningún Gobierno va a retroceder".
"Volver a abrir una discusión tributaria por capricho sería complejo. Estoy seguro de que al final del día vamos a tener que este sistema se va a mantener en el tiempo", aseguró.
Según los datos más recientes del Ministerio de Hacienda, en la Operación Renta 2015, alrededor de 950 mil empresas declararon movimiento en su renta líquida imponible.
"Asumiendo que la estructura de propiedad y de organización se mantiene, alrededor del 90% de las firmas podrá optar ya sea por el sistema semiintegrado o atribuido", afirma Micco.
El 10% restante -cerca de 100 mil empresas y entre las que se encuentran las firmas más grandes- estará obligado a acogerse al sistema semiintegrado, ya que tiene como socios a personas jurídicas o son sociedades anónimas.
Las empresas con estructuras societarias complejas -que tengan socios personas jurídicas- sólo podrán optar por el sistema semiintegrado.