SANTIAGO.- De "poco prudente" calificó la Contraloría el paso del empresario Rafael Guilisasti desde el Consejo de Corporación de Fomento de la Producción (Corfo) a la presidencia de las sociedades Cascada, a través de las cuales Julio Ponce Lerou controla SQM.
Según indica
"El Mercurio", esto se debería al conflicto que mantiene la Sociedad Química Minera con la estatal por operaciones en el Salar de Atacama.
Sin embargo, descartó que exista un conflicto de interés o una infracción a los deberes de probidad en la decisión de Guilisasti.
Desde Corfo han asegurado que el empresario conoció información reservada y estratégica del conflicto judicial que mantienen con SQM, pero Guilisasti desestimó esta acusación.
No obstante, la Contraloría reconoció en el informe que el movimiento del empresario "genera una razonable duda ética".
Las palabras del organismo también se suman a lo que dijo anteriormente el vicepresidente ejecutivo de la Corfo, Eduardo Bitran, quien calificó de
"imprudente" e "impresentable" la decisión del ejecutivo.
En septiembre pasado Rafael Guilisasti
asumió como presidente de empresas cascadas luego de que Julio Ponce Lerou dejara este cargo, quedando así también como director de las firmas vinculadas a SQM, Norte Grande, Pampa Calichera y Oro Blanco.
Ese anuncio se dio el mismo día en que Guilisasti
dimitió a su cargo como consejero de la Corfo, función que desempeñó desde el 2011.
