PARÍS.- La industria europea del automóvil siguió en 2015 la senda de la recuperación iniciada en 2014 y terminó el año con un alza de las ventas de 9,3%, muy por encima de las expectativas de un crecimiento de entre 1 a 3% o incluso de un estancamiento que anticipaban los expertos.
Con España a la cabeza, las ventas de automóviles en la Unión Europea en 2015 sumaron 13,7 millones de unidades, anunció el viernes la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA).
España, con ventas en aumento de 20,9%, e Italia (+15,8%) son los países que registraron el mayor crecimiento en 2015, superando a Francia (+6,8%), Reino Unido (+6,3%) y Alemania (+5,6%).
En España se vendieron 1,03 millones de autos en 2015, frente a poco más de 855.000 en 2014, un nivel que muestra la recuperación del sector, aunque todavía está lejos del nivel anterior a la crisis, que en años como 2007 logró 1,7 millones de coches nuevos matriculados.
En el mes de diciembre de 2015, en la UE se vendieron más de 1,1 millones de vehículos, lo que representa un crecimiento de 16,6%, el más importante registrado en los últimos 28 meses, desde que las ventas volvieron a aumentar.
La marca alemana Volkswagen, afectada por el escándalo de los motores trucados, registró un crecimiento de 6,3%, por debajo del promedio. El constructor, el mayor fabricante europeo, que agrupa a marcas como Audi, Seat y Porsche, registró un crecimiento de 6,1%, contra 7,2% en 2014.
El último trimestre de 2015 fue difícil en todo el mundo para Volkswagen, tras las denuncias de que algunos de sus motores tenían un sistema que detectaba las pruebas de las autoridades y que durante estas alteraba las emisiones contaminantes.
En cambio su competidor alemán BMW aumentó sus ventas en 19,9%, mientras que Renault aumentó las ventas en 9,2% y PSA Peugeot 6,2%.
Según la ACEA, la tendencia global de 2015 fue positiva y el aumento de ventas significativo.
"Los principales mercados terminaron 2015 con resultados sólidos que contribuyeron significativamente a los resultados positivos del año", dijo la asociación.
Sin embargo, los fabricantes advirtieron que "el volumen sigue siendo flojo", apenas por encima de los niveles de 2010, cuando el sector sufrió plenamente el impacto de la crisis económica de 2008.
El escándalo de los motores trucados afectó el jueves al fabricante francés Renault, que reconoció que varias de sus sedes en Francia fueron registradas por inspectores antifraude, desatando una ola vendedora que hundió sus acciones en bolsa.
El segundo mayor fabricante francés, registró pérdidas de más de 20% en sus títulos en una hora, lo que equivale a una caída de su capitalización bursátil de más de 4.000 millones de euros, aunque logró contener la caída y cerró la sesión con una baja de 10,28%.
Pese a que la ministra francesa de Ecología, Ségolène Royal, dijo que las conclusiones preliminares no detectaron ningún tipo de sistema fraudulento, las especulaciones arrastraron incluso a su competidor PSA, que perdió igualmente 5,05%.
