SANTIAGO.- Las cifras azules que predominaron la última semana en los mercados mundiales, se esfumaron esta jornada para dar paso a un verdadero "viernes negro".
Desde Asia hasta Wall Street, pasando por las divisas y las agencias de calificación: por unanimidad, todos los sectores han resentido la decisión de los británicos de abandonar la Unión Europea.
Wall Street cerró hoy con fuertes pérdidas y el Dow Jones, su principal indicador, se desplomó mas de 600 puntos, mientras el Nasdaq cayó un 4,12%, tras una jornada de pánico en las bolsas mundiales por la victoria del Brexit en el Reino Unido.
El Dow Jones bajó al final un 3,39% (-611,21 puntos) y cerró en 17.399,86 unidades, mientras que el índice compuesto del mercado Nasdaq perdió 202,06 puntos hasta 4.707,98 enteros y el selectivo S&P 500 cayó un 3,60% (-76,02 puntos) hasta 2.037,30 enteros.
El mercado interno aminoró las pérdidas al final de la sesión. El IPSA terminó con una baja de 1,42% a 3.965,17 puntos. Entre las mayores pérdidas figuran las acciones de Concha y Toro y Sonda
Luego de cuatro jornadas al alza, el cobre terminó este viernes con un retroceso de 1,7% a US$2,11510 la libra. Mientras que el petróleo Brent, de referencia para Europa, se desplomó 5,4% a US$48,34 el barril. En la misma línea, el WTI se hundió 4,93% y cerró en US$47,64 el barril.
La onza de oro al contado cerró en US$1.315,50, un 4,2 % más que al término de la sesión anterior.
Con una aumento de $10,4 cerró el tipo de cambio en Chile, y llegó a $679,8 vendedor y $679,3 comprador. Esta es la segunda alza más grande que registra la divisa estadounidense en lo que va del año, que le permitió contrarrestar la fuerte caída que tuvo durante la semana. De esta manera, acumuló una baja semanal de $4,5.
Como era de esperarse, los mercados del Viejo Continente cerraron con fuerte pérdidas. En el caso del IBEX 35 de Madrid registró la caída más fuerte de su historia, con una baja de 12,35%. Hasta ahora, el hito era del 10 de octubre de 2008, cuando se desplomó un 9,14%.
El DAX de Frankfurt, el ahora mercado financiero más grande Europa, cayó 6,85%, mientras que el CAC 40 de París bajó 6,82%. La bolsa de Londres FTSE, en tanto, retrocedió 3,15%. El FTSE MIB de Milán también registró una histórica caída de 12,48%.
La libra esterlina llegó a desplomarse unos 18 centavos de dólar durante la sesión, por lejos la mayor baja diaria de la que se tenga memoria, hasta tocar un mínimo no visto desde 1985. El euro retrocedía un 3,1%.
Los primeros mercados que abrieron tras conocerse los resultados de la consulta fueron las asiáticas. El Nikkei de Japón cayó 7,92%, el Shanghai Composite de China lo hizo en 1,30%, y el Hang Seng de Hong Kong en 2,95%.
Standard & Poor's advirtió que Reino Unido perderá su calificación crediticia de triple A después del resultado del referéndum, "ya que es insostenible dadas las circunstancias actuales".
Por su parte, Moody's dijo que el Brexit es "negativo" para las calificaciones de crédito soberano y de otros emisores del país: "Este resultado vaticina un prolongado período de incertidumbre política que pesará sobre el desempeño económico y financiero del Reino Unido", sostuvo.
Los ministros de Finanzas y gobernadores de los bancos centrales del G7 -EE.UU., Alemania, Japón, Francia, Reino Unido, Italia y Canadá- reconocieron que "la excesiva volatilidad y los movimientos desordenados en las tasas de cambio pueden tener efectos nefastos en la estabilidad económica y financiera".
"Los bancos centrales del G7 han tomado las medidas para garantizar la liquidez necesaria y respaldar a los mercados (...) Estamos decididos a recurrir a los instrumentos previstos con tal fin", insistieron y expresaron su confianza en "la resiliencia de la economía y el sector financiero británicos para hacer frente a las consecuencias del referéndum".
Lagarde urgió a las autoridades británicas y europeas a colaborar conjuntamente para asegurar una "transición suave a una nueva relación económica (...), incluida la clarificación de los procedimientos y objetivos generales que guiarán el proceso".
Por otro lado, la directora gerente del FMI expresó "su fuerte respaldo a los compromisos del Banco de Inglaterra y el Banco Central Europeo a ofrecer liquidez al sistema bancario y contener un exceso de volatilidad financiera".