SANTIAGO.- Con buenos ojos fue recibido por el mercado el crecimiento de 2,5% que tuvo la economía durante agosto, en la que destacó el avance de la actividad minera. Sin embargo, distintas entidades bancarias llaman a tener "cautela" con las proyecciones.
"Observamos que desde junio la actividad no minera está comportándose de una forma distinta a lo usual en términos desestacionalizados, lo que hace difícil pronosticar su comportamiento en los próximos meses", afirmó BBVA Research, aunque destacó que la cifra de agosto "podría generar moderados ajustes al alza en la estimación de crecimiento para el año".
Sin embargo, recalcó que "resulta complejo entender el proceso de ajuste que está teniendo la actividad y, en consecuencia, llamamos a tener cautela al momento de pronosticar que la economía estaría recuperando momentum sobre la base de la historia reciente".
En tanto, BCI Estudios destacó que "se observa una aceleración en el crecimiento desestacionalizado tras dos meses de expansión casi nula” y "que los riesgos asociados a una recesión técnica, es decir, dos trimestres consecutivos de contracción económica desestacionalizada, se moderan".
BCI proyecta que el Imacec de septiembre será menor al del mes anterior, ya que no tendrá un efecto calendario favorable como ocurrió en agosto, y ubicaría en el rango 1%-2%.
Santander Estudios coincide con esta estimación –apuntan- a un 1,9% de crecimiento para el noveno mes del año "fundamentado en una contracción del sector minero y una expansión del resto de la economía".
"De este modo –aseguró-, para el tercer trimestre estimamos un crecimiento de 1,6%, dejando atrás los temores de una recesión técnica".
Por su parte, Francisco Klapp, investigados de Libertad y Desarrollo recalcó que "mirando hacía adelante, el panorama no es demasiado alentador y no abundan las señales –más allá de leves alzas en la confianza empresarial- que pudieran adelantar mayor recuperación".
"Más bien pareciera confirmarse el diagnóstico de estancamiento, con un crecimiento algo mayor al 2% para el próximo año, y una lenta convergencia hacia nuestro crecimiento de tendencia hacia el final de la década, tal como adelanta el FMI y otros organismos internacionales", apuntó.
En cuanto a la discusión de si el Banco Central debiese modificar la tasa de interés para impulsar el crecimiento, Goldman Sachs mantuvo su pronóstico de que el Consejo del Banco Central de Chile no realizará cambios.
"En nuestra evaluación, sólo acudirá a los recortes de tasas en caso de que el impulso de la economía se debilite aún más, el tipo de cambio se mantiene bien anclado y la inflación se mueva más rápido hacia el punto medio objetivo del 3,0%", puntualizó.