El proyecto que busca una compensación a favor del Estado por la explotación mineral de cobre y el litio y que busca destinar US$450 millones para las regiones a través de tres fondos distintos, fue aprobado por la Cámara de Diputados y despachado a ley.
"Después de cuatro años de discusión, lo primero que hay que señalar es reconocer el liderazgo y dirección de aquellos diputados y diputadas que dieron inicio a esta discusión hace años atrás, entre ellos, Jaime Mulet", comenzó su intervención en el hemiciclo el ministro de Hacienda Mario Marcel.
Asimismo, el jefe de la billetera fiscal indicó que "es importante reconocer que es un proyecto que ha tenido cambios muy significativos en su tramitación, donde se le han hecho una serie de modificaciones que han permitido lograr de una mejor manera el objetivo, que es generar y aumentar la partición del Estado en las rentas económicas de la energía no renovable como es la minería, sin desincentivar el desarrollo sostenible de esta materia tan importante".
Según expuso el titular de hacienda este proyecto permitirá financiar obras públicas, infraestructura, programas de investigación, desarrollo y reducir la inseguridad en Chile".
Asimismo, explicó que comenzará el 2024 con el aumento de la recaudación con los pagos provisionales del royalty que todavía es una "fracción relativamente pequeña", según Marcel. Y luego, habrán aumentos significativos el 2025 y el 2026 se aproximará a la recaudación en régimen.
Durante la intervención, parlamentarios de oficialismo cuestionaron la distribución de los recursos en las distintas comunas y regiones del país que estaba estipulado originalmente. Críticas que se manifestaron durante la comisión de Minería de la Cámara Baja y que el Gobierno finalmente logró alinear.
Sobre las diferencias expresadas Marcel dijo que "es un tema que era natural que se planteara. Cuando se distribuyen recursos nunca hay una forma perfecta, pero creo que en primer lugar, los parlamentarios entendieron que era importante resolver el problema ahora y que no quedara pendiente para una comisión mixta con un incierto resultado".
Todas las indicaciones que fueron sometidas a votación durante este tercer trámite constitucional fueron aprobadas por amplia mayoría en la Sala del Congreso, con el rechazo del Partido Republicano y algunos parlamentarios de Chile Vamos.
Con todo, la iniciativa fue despachada a ley y se evitó pasar por una comisión mixta, después de más de cuatro años de tramitación en el Congreso.
