El dólar esta mañana abría con mínimos avances en el mercado cambiario local, que lo ubicaban en torno a los $957, manteniendo un valor no visto desde abril.
Esto, a la espera de datos económicos relevantes en Estados Unidos y China que podrían marcar el rumbo de las próximas sesiones.
En concreto, a las 08.48 horas, el billete verde avanzaba $0,24 quedando en puntas de $957,24 vendedor y $946,87 comprador.
Ricardo Bustamante, subgerente de estudios de Capitaria, señaló que "la cotización del dólar registra escaso movimiento en la presente jornada, a la espera de datos claves que se revelarán durante este miércoles y por fuerzas contrarias en sus principales fundamentos".
Bustamante destacó que "el precio de los futuros de cobre registra una nueva debilidad, acercándose a la parte baja de la banda de fluctuación que ha registrado en las últimas jornadas, buscando algún catalizador que genere una tendencia más definida en el corto plazo".
A esta baja en el cobre se le suma una leve caída en el Dollar Index, el índice que mide el valor del dólar frente a una canasta de monedas internacionales, lo cual, según Bustamante, "genera un choque de fuerzas para el tipo de cambio".
Felipe Sepúlveda, analista jefe de Admirals, añadió que "el tipo de cambio comenzó la jornada en $956, impulsado por la debilidad en el mercado del cobre y las expectativas globales de estímulo en China".
El metal rojo, operando en un rango lateral desde mediados de octubre, muestra una caída del 0,61% que lo sitúa en US$4,33 por libra.
Sepúlveda explicó que esta caída refleja la anticipación del mercado respecto a posibles estímulos por parte de China, que se debatirán en la Asamblea Nacional Popular, donde se espera que se anuncien medidas de apoyo económico, con un paquete que podría superar los 10 billones de yuanes.
A nivel global, el Dollar Index también muestra una leve baja del 0,06%, aunque con una cautela persistente en los mercados.
"El mercado mantiene cautela ante datos importantes de Estados Unidos, en especial el PIB, que se publicará más tarde", puntualizó Sepúlveda.
El peso chileno, por su parte, enfrenta una presión constante debido a factores externos.
La combinación de la baja en el cobre y la creciente demanda de dólares en medio de un clima de incertidumbre internacional ha incentivado a los inversionistas a buscar activos refugio.
"Esta situación lleva a los inversionistas a buscar activos refugio, impulsando al dólar frente a monedas emergentes como el peso chileno y llevando a los techos técnicos que nos encontramos ahora", explicó Sepúlveda, añadiendo que "de continuar las alzas, el siguiente objetivo se encuentra en los $965 y solo podemos hablar de un cambio en la tendencia si tenemos cierres bajo los $935".
