Cine

Dos asesinos a sueldo irlandeses, Ken (Gleeson) y Ray (Farrell), son enviados por el mafioso londinense Harry Waters (Fiennes) a la ciudad de Brujas, en Bélgica, luego de un trabajo que no resultó del todo bien en la capital británica. Mientras Ken disfruta los días como turista, Ray se aburre y sólo espera regresar a casa, pese a la culpa que lo aqueja. Su panorama mejora cuando durante el rodaje de una película conoce a Chloë (Poésy), una microtraficante y ladrona, punto desde el cual una serie de coincidencias y enredos mientras espera la clave llamada de su jefe.

Collin Farrell estuvo nominado a un Globo de Oro por su actuación en esta película, el primer largometraje dirigido y escrito por el dramaturgo británico Martin McDonagh. La cinta fue filmada completamente en Brujas, la que debió "disfrazarse" con adornos navideños cuando ya era marzo.