Cine

Una vez al año, un reportero invita a algunos de sus mejores amigos a un fin de semana lleno de diversiones. Sin embargo, poco antes de cumplir con el rito de este año, la CIA convence al periodista de que entre sus invitados se cuentan agentes infiltrados rusos, e incluso le entregan equipo de vigilancia para que lo instale durante esos días. Cuando los convocados arriban al lugar, rápidamente se dan cuenta de lo que realmente está sucediendo, y del recelo con el que su anfitrión los ha recibido.

Esta adaptación de una de las famosas novelas de Robert Ludlum marcó el fin de la carrera como director de Sam Peckinpah, que nunca más volvería a rodar un largometraje antes de su muerte un año después del estreno. En todo caso, Peckinpah fue despedido después del rodaje, luego de que se opusiese férreamente a reeditar la película tras un testeo de audiencias desfavorable.