Oriundo de Los Andes, José Miguel Navarrete tenía 22 años cuando decidió iniciar una carrera en el mundo del transformismo, donde rápidamente destacó por su humor y gran personalidad.
A diez años de su debut, hoy es considerado uno de los transformistas más conocidos de nuestro país gracias a su show "El juego e’ La Botota", que realiza junto a Randy Drag y Fernanda Brown.
Nacido en Francia, Pablo Poulain creció rodeado de artistas que lo inspiraron a la hora de vincularse al mundo de las artes.
Hoy, con 27 años, convalida sus estudios de Comunicación Audiovisual con el transformismo, aunque no para desarrollarlo en shows de discotheque sino que apelando a lo artístico y usándolo como una bandera de lucha por los derechos de los homosexuales.
Roberto comenzó en el mundo del transformismo hace ocho años, tras probar como bailarín en la discotheque Búnker. Su talento lo hizo merecedor del primer premio en el concurso Miss Fausto y Drag Queen Latinoamérica, donde destacó por ser "una de las chicas más lindas del ambiente". Actualmente, y con 26 años, participa junto a La Botota y Randy Drag en el show "El juego e’ La Botota".
Marcelo Ramírez era pastor evangélico, estaba casado y llevaba lo que muchos llamarían "una vida tradicional". Sin embargo, un traumático hecho lo llevó a aceptar algo que hasta entonces se negaba a asumir: Su homosexualidad. Hace unos años se inició en el transformismo, ganando el programa "Yo soy" gracias a su labor como doble de Palmenia Pizarro.
Sebastián tiene 28 años y hace tres creó a Luz Violeta, luego de superar un severo trauma que cargaba desde su infancia.
Desde sus inicios en el transformismo se ha especializado en la realización de rutinas de stand up comedy, mostrando su trabajo en diversos espacios de televisión, como "Talento Chileno" y "El Club de la Comedia".
Argentino, oriundo de Concordia, Pablo Carayani ha hecho carrera en su país y el nuestro gracias a su talento como actor, cantante y bailarín. A sus 27 años, ya ha participado en numerosos espectáculos musicales tanto en Chile como en el extranjero, lo que le ha permitido construirse un nombre en el mundo del transformismo.
Es uno de los participantes más jóvenes de la competencia y, al igual que Marcelo Ramírez, proviene de una familia evangélica. Aunque su sueño siempre fue dedicarse al transformismo, comenzó a ganarse la vida como gásfiter en la construcción. Sin embargo, hace tres años practica este oficio en paralelo a sus rutinas de humor y canto en el circo "Show Fama".
Nació hace 38 años en la ciudad de Antofagasta, donde hace más de diez años comenzó a construir un nombre como transformista y animador de eventos de discoteque. Con una carrera ya consolidada en el norte del país, se trasladó a Santiago para abrirse paso en el mundo del transformismo.