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Uso de "infiltrados", permisos y psicólogos: El complejo trabajo tras el docurreality "4to Medio"

La productora ejecutiva del área de telerrealidad de TVN, Mariana Hidalgo, cuenta los detalles de la segunda temporada del programa. Se estrena esta noche, tras un año y medio de preparación.

09 de Marzo de 2016 | 12:53 | Por Carolina Cerda M., Emol
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Los chicos que constarán sus historias en "4to Medio".

TVN
SANTIAGO.- "Es un trabajo súper profundo el que se hace", dice Mariana Hidalgo, la productora ejecutiva del área de telerrealidad de TVN que está a cargo del docurreality "4to Medio". Pero esa frase es una gran simplificación de la exhaustiva labor que hace el canal junto a la productora Parox. Porque lo que se verá hoy desde las 23:30 horas será el fruto de un año y medio de trabajo.

En ese período se extendió una invitación a cerca de 100 colegios subvencionados particulares de la región metropolitana para que fueran parte de este programa. Entre los que contestaron, comenzó una ardua selección que implicó que desde fines de 2014 se empezaron a hacer castings de cursos completos. Este trabajo junto a los alumnos se hacía con sicólogo incluido: "Si vas a estar interviniendo en la vida de los chicos, tenemos que estar súper seguros de que esto no es un daño para ellos, sino que hasta un beneficio", explica Hidalgo sobre este punto.

Luego, de las selecciones se debía pasar por varios filtros internos de cada colegio: el consejo directivo, el centro de padres y el centro de alumnos. Sólo tras eso se elige a un recinto escolar y a través de más entrevistas personales con ayuda de un sicólogo hechas durante el verano del año pasado, se decidió quiénes serían los "personajes" que sirven como hilo conductor para narrar lo que ocurre a chicos comunes cuando en el último año de colegio deben dar un paso al mundo adulto y decidir qué quieren hacer con sus vidas.

El resultado es un espacio que —centrado en siete alumnos—, condensa en 14 episodios lo que ocurrió en 2015 a los dos cuartos medios del Los Andes Country Day College de la comuna de Peñalolén, quienes tuvieron como un compañero más a un equipo de la productora Parox como parte de su vida en el colegio, en la casa y con sus amigos. De hecho, además de los encargados de hacer este registro audiovisual, había un "infiltrado" en el colegio.

Según Hidalgo, se trataba de un periodista que estaba de punto fijo en el lugar para estar atento a lo que podía pasar. "Esto es un docurreality y aunque se edita y se musicaliza, son historias reales" dice y explica que el hecho de que fue un largo tiempo de grabación —desde el regreso a clases al momento en que saben los resultados de las postulaciones a la universidad—, ese tiempo da espacio para que los procesos vayan tomando forma y se puedan ir armando los episodios con resultados claros.

A diferencia de programas como "The Hills" de MTV, acá no se hacen recreaciones de lo ocurrido fuera de cámara. "Hay un proceso de contención, se le dice a los chicos que no manden los mensajes de texto o no tengan las conversaciones importantes hasta que haya un equipo presente. Así, las cosas y las discusiones van ocurriendo en cámara frente a cámara". Incluso en el caso de momentos que pueden ser complejos, como tras las reuniones de apoderados.

De hecho, también se intenta que las peleas con los padres aparezcan completas de manera de que se entienda el contenido en pantalla y las experiencias ajenas puedan servir a lso telespectadores, pues este es un programa familiar. "Pero todo se hace desde el respeto, también se ayuda a que se enfríen los ánimos", aclara Hidalgo.

Lo aprendido en la primera temporada



Una de las preocupaciones del equipo es que esta no fuera demasiado parecida a la primera temporada. "No se van a encontrar con una copia remozada, es un programa que tiene la capacidad de reinventarse en sí mismo, y buscamos cómo darle un valor agregado".

Hidalgo cuenta que hay varias cosas que se aprendieron tras el primer ciclo del programa. Para empezar, está la necesidad de contar menos historias. De ese modo, el público conoce más a los "personajes" principales y también puede verlos en distintas facetas.

Además, decidieron trabajar con el mismo equipo de la vez anterior, porque el know how ya se había adquirido, lo que hacía más simple la labor y también, hicieron un mayor trabajo con la proyección sicológica de lo que podía ocurrir con los personajes centrales.

Si bien la productora ejecutiva explica que la misión del espacio no es sólo conseguir un buen rating, sino que el público se vea reflejado en estos conflictos, considera que sus elementos son llamativos: "Tiene amor, conflicto, emoción, sorpresa... la vida tiene muchas veces mas condimentos de los que se le pueden poner a la ficción. Siento que va a sorprender, a veces dan rabia los personajes, otras, dan ganas de salir corriendo a hacerles cariño. De alguna manera podemos contar una historia que parece de ficción, pero el programa no lo es".
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