Harold Bloom, el crítico literario que defendió el canon occidental en varios libros influyentes que aparecieron no solo en los programas de estudios universitarios sino también en las listas de best sellers, falleció en un hospital de New Haven a la edad de 89 años.
Su muerte fue confirmada por su esposa, Jeanne Bloom, recordando que enseñó su última clase en la Universidad de Yale el pasado jueves, según The New York Times. Bloom era habitualmente llamado en distintos círculos "el crítico literario más notorio de América" y se enfrentó a casi todas las tendencias de la crítica literaria de su época.
Principalmente abogó por la superioridad literaria de los gigantes occidentales como Shakespeare, Chaucer y Kafka, todos blancos y masculinos, señalaron sus propios críticos, sobre escritores favorecidos por lo que llamó "la escuela del resentimiento", con lo que se refería a los multiculturalistas, feministas, marxistas, neoconservadoras y otros a los que consideraba que traicionaban el propósito esencial de la literatura.
Bloom tenía una afición especial por las figuras heroicas de la literatura. "Shakespeare es Dios y sus personajes son tan reales como las personas, moldeando las percepciones occidentales de lo que es ser humano", defendía en uno de sus obras más conocidas, "Shakespeare: La invención de lo humano" (1998)
Entre sus otros libros más vendidos se encuentran su obra maestra "El Canon occidental: Los libros y la escuela de las edades", publicada en 1994, y "Cómo leer y por qué" (2000).