Una lamentable pérdida está sufriendo la actriz y presentadora de televisión española Ana Obregón tras la muerte de su hijo de 27 años, Álex Lequio.
La noticia fue confirmada por la familia ayer miércoles, y hasta hoy sus padres y más cercanos no habían querido entregar sus impresiones por el deceso. Pero este jueves, a través de Instagram, la propia conductora compartió una foto con su hijo con un breve y desgarrador mensaje: "Se apagó mi vida".
Álex, quien era su único hijo, llevaba enfrentando un cáncer desde marzo de 2018, el que había comenzado como un simple dolor de espalda. Inició su tratamiento en Nueva York donde estuvo siete meses y luego regresó a España para continuar con las terapias.
El joven se había convertido en un ejemplo de optimismo y fortaleza en su país, y sus padres, Obregón y el conde Alessandro Lequio, solo se limitaban a contar la evolución del tratamiento de su hijo en un intento por generar esperanza.
En los últimos meses, tanto las redes sociales de él como la de sus padres, no presentaban mayor actividad y ya habían despertado una preocupación en quienes se mantenían al pendiente de su estado.
Ana Obregón y su hijo mantenían una relación estrecha y de confianza. En más de una ocasión él comentó que sus progenitores eran sus mejores amigos y la actriz no perdía ocasión de comentar lo "orgullosa" que se sentía de su hijo por sus buenas notas y su forma de ser.
Cuando se graduó en Estados Unidos comentó en la revista ¡Hola!: "Ver hecho todo un hombre con su toga y con su diploma, al niño rubito y de pelo rizado, siempre tan responsable y tan bueno, que nunca me dio guerra alguna, me ha traído infinidad de imborrables recuerdos".
