que no se rinde en la búsqueda por la expansión de su multiverso, que ahora verá
.
La sinopsis (sin mencionar spoilers) es, en el papel, simple:
"Deadpool & Wolverine" continúa la historia de
Wade Wilson (Ryan Reynolds), quien luego de años de inactividad
debe volver a su rol de "mercenario bocazas" ante el inminente peligro que corre su universo. Sin embargo, para salvar a sus seres queridos y convertirse en el auto proclamado "Jesús de Marvel",
deberá contar con la ayuda de uno de los héroes más reconocidos del universo:
Logan/Wolverine (Hugh Jackman).
Esto llevará a una aventura que tiene el emblemático humor grosero, referencial y extremadamente divertido del personaje rojinegro, pero que también tiene los errores que este universo cinematográfico ha mostrado durante los últimos cuatro años. Dicho eso, entre
todo el desorden que uno siente, se puede encontrar un corazón palpable para estos personajes que nos entregan una
película no apta para niños, pero si apta para fanáticos. En este artículo dejo los puntos más importantes.
Dúo dinámico
Partamos por el lado positivo. Gran parte de, si es que no toda, la idea de generar esta película era juntar a dos icónicos personajes y sus reconocidos actores. El peso completo del concepto de esta historia descansaba en los hombros de lo que podían lograr Deadpool y Wolverine al estar juntos. Por suerte, esta secuela lo entendió desde el primer minuto y
logró construir una dinámica que permite observar diferentes matices de dos superhéroes con diferentes personalidades, pero similares experiencias.
La irreverencia de sarcástico mercenario siempre toca los nervios de quien lo acompañe. En el caso de Logan, esto permite que afloren orgánicamente partes de sus motivaciones, pero también saca el lado violento de éste, llevándonos como audiencia a
espectaculares escenas de acción que harán vibrar la sala de cine.
De hecho, el ida y vuelta entre estos personajes es tan buena, que uno de los problemas que la entrega tiene es que no lo aprovecha lo suficiente. Ya sea saltando a otro lado de la historia o incluyendo a un tercero en la dinámica,
"Deadpool & Wolverine" pierde oportunidades para que la película sea fiel a su título. Esto no quiere decir que con lo ya incluido uno no quede satisfecho.
La irreverencia de Deadpool saca el lado violento de Wolverine (Hugh Jackman). Crédito: AP.El venenoso multiverso
A pesar de tener varios intentos,
el universo cinematográfico de Marvel (UCM o MCU, en inglés)
no ha encontrado la fórmula para volver al éxito generado hasta el año 2019. La inserción del concepto del "multiverso" terminó por ser una complicación, más que un complemento para la saga. Esta se ha escrito y re-escrito tantas veces que, cada vez que comienza una nueva historia, el espectador se ve obligado a escuchar una exposición de información que entorpece la experiencia del relato.
El caso de
"Deadpool & Wolverine" no es diferente. Debido a la cantidad de reglas que se han establecido en el multiverso,
la trama se ve obligada a saltar de un lado para el otro, siempre parando para volver a tener exposición en diálogos largos. Este desorden nubla la historia, olvidando en momentos por qué los personajes están en cierto lugar. Además, la restricción de este multiverso solo permite reciclar lugares ya conocidos, creando lugares muy poco interesantes en lo visual, aunque esta puede ser una falta del director y no del estudio (Marvel).
Uno pensaría que luego de tener una cinta que ganó el Oscar a Mejor película por su utilización del multiverso, como "Todo en todas partes al mismo tiempo", podríamos encontrar otros grandes ejemplos para este concepto. Por desgracia, Marvel ha demostrado lo contrario.
Tono y balance
El punto anterior termina repercutiendo en el
balance de la película, la cual
se ve constantemente interrumpida. No obstante, en los momentos que la secuela logra volver a ese tono que pudo encontrar en sus entregas anteriores, brilla con mucha acción y humor, al más estilo Deadpool.
En el mejor de los casos, uno hubiese querido que ese ritmo se lograse mantener durante sus 2 horas y 7 minutos de duración. Esa no es la realidad de esta tercera parte, aunque los fanáticos sí se podrán encontrar con varias escenas que se destacarán como las mejores de la trilogía.
Deadpool y Wolverine cautivarán a la audiencia con risas, golpes y una sorprendente emocionalidad, incluso cuando deban acarrear con los pecados que se adhieren por unirse a un UCM de capa caída.
Ryan Reynolds y Hugh Jackman hacen un sólido trabajo en sus personajes, brindando honor a sus legados. Esta por ningún lado es una de las mejores películas del género, pero sí
es una experiencia satisfactoria en la sala de cine, resguardando las expectativas (obviamente).
Nota: 3.5/5.0
"Deadpool & Wolverine" ya se encuentra disponible, solo en cines.
Agustín Pérez Achurra, crítico de cine (https://www.instagram.com/hobby.space/)
La película continúa la historia de Wade Wilson (Ryan Reynolds), quien debe volver a su rol de "mercenario bocazas" ante el inminente peligro que corre su universo. Crédito: AP.
