BAGDAG.- Al menos siete personas murieron hoy y otras 20 resultaron heridas tras los dos atentados suicidas consecutivos perpetrados en la provincia de Al Anbar, en el oeste de Irak.
Según informó EFE, el primer suicida hizo estallar el cinturón explosivo que llevaba adosado al cuerpo en la entrada del edificio de la administración local de la población de Ameriya al Faluya.
En medio del caos causado por ese primer atentado, otro terrorista aprovechó para entrar en el edificio e inmolarse también con un cinturón de explosivos.
Entre los heridos por los atentados, que causaron importantes destrozos materiales, figura el presidente del Consejo local, Shaker Mahmud al Isaui.
La fuente señaló que las autoridades locales impusieron un toque de queda por tiempo indefinido en un intento de impedir nuevos atentados.
La provincia de Al Anbar es escenario de una ofensiva militar cuyo principal objetivo es recuperar su capital, Ramadi, arrebatada al Ejército por el grupo yihadista Estado Islámico (EI) el pasado 17 de mayo.
Irak se encuentra inmerso en una grave crisis debido al avance de los yihadistas, que hace un año se hicieron con el control de Mosul, la segunda ciudad del país.
El EI proclamó además el 29 de junio un califato que abarca desde la provincia siria de Alepo a la iraquí de Diyala