ESTAMBUL.- Un total de 13.500 refugiados sirios, la mayoría mujeres, niños y ancianos, entraron a Turquía entre los días 3 y 10 de junio, huyendo de los combates cerca de la frontera, según datos del Gobierno turco.
Las autoridades turcas permitieron el paso de los grupos de refugiados a través del paso fronterizo de Akçakale, según explicó el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Tanju Bilgiç.
Bilgiç señaló que los sirios huyen tanto de los bombardeos aéreos de la coalición internacional antiyihadista como del avance de las milicias kurdas, que desde hace semanas combaten contra el grupo radical Estado Islámico (EI) en una franja cercana a la frontera turca.
El portavoz de Exteriores negó que Turquía haya cambiado su política de "puerta abierta" hacia los refugiados sirios, contrariamente a lo que aseguró el jueves el viceprimer ministro turco, Numan Kurtulmus.
Durante una visita a la provincia de Sanliurfa, donde se ubica el paso de Akçakale, Kurtulmus aseguró que Turquía pondría fin al cruce de los sirios porque "ya no hay tragedia humanitaria".
"Esperamos que vayan a zonas seguras en su propia región" añadió.
Tanju Bilgiç matizó esta aseveración al señalar que "hasta hoy, Turquía ha abierto sus puertas a quienes huyen de la opresión del régimen de (Bashar al) Assad: Tal y como ha dicho Kurtulmus, abre sus puertas ante una tragedia humanitaria".
"En este marco, no hay cambios en nuestra política", reiteró el portavoz.
Desde hace muchos meses, Turquía permite el paso de refugiados sirios únicamente en puntos determinados de cruce, a menudo tras días de espera, una actitud que contrasta con la del primer año de la guerra civil, cuando era más fácil cruzar y pedir refugio en Turquía.
Actualmente hay 1,7 millones de refugiados sirios en Turquía, según estimaciones de Naciones Unidas, aunque Kurtulmus elevó esta cifra a los dos millones.