Tuan Tuan y Yuan Yuan en el zoológico de Taipei.
AFP
BEIJING.- La osa panda Yuan Yuan, regalada por China a Taiwán con el fin de mejorar los lazos entre ambos territorios, fingió estar embarazada en los últimos días con el fin de conseguir mejor comida y alojamiento en el parque zoológico de Taipei, donde vive desde 2008.
Desde el pasado mes de junio, el animal mostró señales que según los expertos apuntaban a ese diagnóstico, como pérdida de apetito, dilatación del útero o mayor presencia de progesterona en sus excreciones, lo que alimentó las esperanzas de que podría ser madre próximamente.
Sin embargo, veterinarios especializados que viajaron desde China con la misión de examinar a la osa, aseguraron que por ahora no hay embarazo ninguno y señalaron que Yuan Yuan había conseguido "falsificar" sus síntomas, después de haber sido inseminada artificialmente a finales de marzo.
Según la prensa china y taiwanesa, estas sospechas daban al animal la posibilidad de mejor comida y una zona más cómoda de esparcimiento, por lo que su organismo pudo, no se sabe si voluntaria o involuntariamente, fingir el embarazo.
Yuan Yuan, que vive en el zoo de la capital taiwanesa junto al macho Tuan Tuan, ya fue madre de un cachorro, Yuan Zai, en julio de 2013, por lo que la hembra ya sabía con anterioridad las "ventajas" que le podría brindar esta situación, muy apreciada por los encargados de la conservación de esta especie en grave peligro de extinción.
El oso panda, todo un símbolo nacional para los chinos, corre peligro de extinguirse debido a la paralela desaparición progresiva de su hábitat, los bosques de montaña de la China central, algo que ha producido endogamia en la especie y con ello grandes dificultades reproductivas.
Actualmente viven unos 1.600 pandas en estado salvaje, a los que hay que añadir otros 210 en cautividad, algunos de ellos en zoológicos de todo el mundo como el Zoo Aquarium de Madrid o el Zoo Chapultepec de Ciudad de México.