BEIRUT.- Nueve hospitales han resultado afectados por recientes bombardeos en la provincia septentrional siria de Idleb, en los que han muerto once civiles y 31 han sufrido heridas.
En un comunicado, Médicos Sin Fronteras (MSF) precisó que los ataques aéreos se produjeron entre el 7 y el 10 de agosto y golpearon, tanto de forma directa como en las proximidades de nueve centros hospitalarios, tres de los cuales están recibiendo apoyo de la ONG.
Los fallecidos son tres trabajadores sanitarios, un pacientes y otros siete civiles; mientras que entre los heridos hay siete miembros del personal hospitalario y seis enfermos.
La organización, destacó que los bombardeos han ocasionado el cierre de un centro de diálisis, que proporcionaba "tratamiento vital" en una área en la que viven 30.000 personas, y que ahora los pacientes deben trasladarse a más de 70 kilómetros para recibir asistencia, en medio de un contexto de grave inseguridad.
Agregó además que otros servicios hospitalarios fueron afectados, los que incluyen servicios de cirugía, ortopedia y fisioterapia.
Además, cinco ambulancias resultaron dañadas, dos de ellas totalmente. También quedaron destruidos un generador y un laboratorio.
El coordinador general de MSF para Siria, Sylvain Groulx, explicó que "estos bombardeos recientes son una clara violación del derecho internacional humanitario, que prohíbe ataques militares a hospitales".
"Los ataques aéreos tienen capacidad de alcanzar edificios y objetivos específicos, y la localización de estos hospitales está bien establecida y es conocida", agregó.
El grupo también recordó que en los últimos meses se han registrado ataques similares a infraestructuras civiles, hospitales y centros de salud en zonas que están fuera del control de las fuerzas del presidente Bachar al Asad.
Casi toda la provincia de Idleb está en poder del Frente al Nusra, filial siria de Al Qaeda, y de otros grupos opositores, que han arrebatado a las autoridades el dominio de amplias áreas, que suelen ser blanco de los bombardeos gubernamentales.
La ONG solicitó a las partes en conflicto que respeten los hospitales y protejan a la población civil.