Los resultados de las PASO en Tucumán generaron protestas opositoras, en medio de graves denuncias de fraude.
AFP (archivo)
BUENOS AIRES.- Este jueves seguían en Argentina las reacciones a la decisión judicial que declaró nulas las polémicas elecciones realizadas en Tucumán. La determinación, adoptada por la Cámara en lo Contencioso Administrativo provincial, fue calificada como "histórica" por sectores opositores.
El tribunal ordenó al actual gobernador, José Alperovich, convocar nuevos comicios. El jefe de Gobierno provincial ya anunció que apelará.
Las elecciones, enmarcadas en las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) realizadas en Argentina en agosto pasado, derivaron en graves
denuncias de irregularidades presentadas por el candidato opositor, el radical José Cano, quien previamente se había retirado del conteo de votos.
Entre las denuncias se cuenta la desaparición del registro de cámaras instaladas en el recinto en el que se guardaban las urnas utilizadas en el acto electoral.
"Hay un poder independiente en Argentina"
La determinación judicial fue saludada por el postulante opositor a la jefatura provincial.
"Hay un poder independiente que puso las cosas en su lugar y que confirmó que cada una de nuestras denuncias estaban acreditadas con pruebas", aseguró Cano.
El recuento daba hasta ahora como ganador al postulante oficialista Juan Manzur, del Frente Para la Victoria, con una ventaja de 11%.
La resolución de la Cámara en lo Contencioso fue suscrita por los magistrados Norberto Salvador Ruiz y Ebe López Piossek, quienes integran la Sala I del organismo.
"Golpe de Estado" judicial
El actual gobernador, en tanto, calificó el dictamen como un "golpe de Estado judicial".
"El fallo atenta contra el sistema democrático, ignora la voluntad del pueblo y genera un estado de incertidumbre y anarquía", añadió el dirigente oficialista en un comunicado conocido anoche.
Tras el anunciado recurso de casación que interpondría Alperovich, la decisión final quedaría en manos de la Corte Suprema provincial, e incluso podría escalar al máximo tribunal nacional.
La víspera había anunciado su renuncia a la Corte Suprema de Argentina el veterano magistrado Carlos Fayt, de 97 años de edad. Su salida se haría efectiva el próximo 11 de diciembre.
El juez resistió prolongadas presiones del oficialismo, que buscaba concretar su dimisión por edad: su reemplazo será definido, junto a otros poderes del Estado, por la administración que suceda a la actual Presidenta, Cristina Fernández.