El ex parlamentario pertenecía al Partido de los trabajadores, misma colectividad de la Presidenta brasileña Dilma Rousseff.
EFE
BRASILIA.- El ex diputado André Vargas, quien fue miembro del gobernante Partido de los Trabajadores (PT) y llegó a ser vicepresidente de la Cámara baja de Brasil, fue condenado este martes a 14 años y cuatro meses de cárcel por las corruptelas en Petrobras.
Vargas, de 51 años, hizo toda su vida política en el PT, al que pertenecen la presidenta Dilma Rousseff y su antecesor y padrino político Luiz Inácio Lula da Silva, pero se desvinculó del partido a fines del año pasado, cuando se ventilaron las primeras acusaciones en su contra por los escándalos en la empresa estatal.
El juez federal Sergio Moro, a cargo del caso, dictó hoy una pena de 14 años y cuatro meses contra el ex diputado y también condenó a once años y cuatro meses a su hermano León Vargas y a doce años y diez meses al publicista Ricardo Hoffmann, otro de los implicados.
En el caso de André Vargas y su hermano, la condena fue por los delitos de corrupción pasiva y lavado de dinero, mientras que la sentencia contra el publicista fue por corrupción activa y también por lavado de dinero.
El mismo magistrado condenó este lunes a 15 años y cuatro meses de cárcel a Joao Vaccari, ex tesorero del PT, que es el partido más afectado por las corruptelas en Petrobras, que según la propia petrolera estatal, permitieron el desvío de unos 2.000 millones de dólares entre 2004 y 2014.
En la sentencia dictada hoy martes, Moro destacó la "gravedad concreta de los delitos en cuestión" y que los tres condenados "estaban implicados en una práctica habitual, sistemática y profesional de crímenes contra la administración pública".
En esos mismos términos se había referido a Vaccari, quien según la sentencia fue una especie de "recaudador" de recursos de origen ilícito para las campañas del PT, una formación que en los últimos años ha sido investigada por diversos asuntos de corrupción.
El antecesor de Vaccari en la tesorería del PT, Delubio Soares, está en prisión domiciliaria y cumple una pena de ocho años por su participación en un asunto de sobornos parlamentarios denunciado en 2005, en medio del primer mandato de Lula.
Entre los 25 condenados por ese escándalo de sobornos figuró el ex ministro José Dirceu, otro importante líder del PT, considerado en la época como la "mano derecha" de Lula y ahora también procesado por su presunta participación en los casos de corrupción en la petrolera.
Según sostienen las autoridades, Dirceu fue uno de los ideólogos del fraude, en la que habría participado aún estando preso por los escándalos de 2005.
Por este caso, también se investiga empresas privadas, medio centenar de políticos del PT y otros seis partidos, dos de ellos de la oposición.