JERUSALÉN.- Una menor, que había resultado herida al ser apuñalada este jueves por un palestino en un asentamiento judío de Cisjordania, murió horas después, a causa de sus heridas, informaron fuentes hospitalarias israelíes.
La víctima, que fue identificada como Hillel Yafa Ariel, de 13 años, falleció en el hospital Shaarei Tzedek de Jerusalén tras recibir varias puñaladas en la parte superior del cuerpo.
La menor se encontraba en su vivienda del barrio de Harsanina, en la colonia judía de Kiriat Arbá, vecina de la ciudad cisjordana de Hebrón, cuando el palestino entró armado con un cuchillo y comenzó a apuñalarla, informaron fuentes de seguridad y medios locales israelíes.
El atacante murió posteriormente por los disparos de una patrulla de seguridad civil del asentamiento, uno de cuyos miembros fue apuñalado por el palestino, además de resultar herido por uno de sus colegas en la operación para reducir al asaltante.
El miembro de la patrulla urbana herido, de 31 años, se encuentra ingresado en estado grave en otro hospital de Jerusalén, según medios locales.
El Canal 10 de la televisión israelí informó de que el atacante palestino, de 17 años y oriundo de la aldea de Bani Naim, cercana al asentamiento judío, logró saltar la verja de la colonia e introducirse en la vivienda donde se hallaba la menor.
En un comunicado, las Fuerzas Armadas israelíes recordaron que "hace poco, un terrorista se infiltró y apuñaló a un civil en la comunidad de Kiriat Arbá", en la ciudad cisjordana de Hebrón.
El pasado viernes, una palestina murió por disparos de fuerzas israelíes tras protagonizar un supuesto intento de atropello con un vehículo, que dejó a dos civiles israelíes heridos a la entrada de la misma colonia en el territorio ocupado de Cisjordania, según informó el Ejército israelí.
Por otra parte, la Policía ha localizado en el barrio industrial-comercial de Talpiot, en Jerusalén oeste, un bolso que contenía una granada de mano y dos bombas de estruendo, y se ha abierto una investigación para esclarecer su origen.
Los hechos se enmarcan en la ola de violencia que comenzó en octubre de 2015, que ha causado la muerte de 216 palestinos (más de dos tercios de ellos atacantes o presuntos atacantes, según Israel), 35 israelíes y tres extranjeros.
