BUENOS AIRES.- Este lunes Argentina conmemorará el vigésimo segundo aniversario del atentado en la Mutual Judía AMIA, el peor ataque terrorista sufrido por el país vecino y que aún sigue sin responsables.
En recuerdo a los 85 fallecidos que dejó el ataque,se realizará un acto a la misma hora en que ocurrió el atentado el 18 de julio de 1994, a las 09.53 hora local.
Bajo el lema "La memoria nos une", la ceremonia se realizará a las puertas de la reconstruida sede del recinto, donde está previsto que hablen un dirigente de la AMIA y un representante de los familiares de las víctimas.
En tanto, organizaciones que representan a sobrevivientes y familiares de las víctimas, y que en los últimos años han mostrado sus diferencias con los dirigentes de la colectividad judía respecto a la estrategia en el reclamo de justicia, harán actos diferentes
La asociación Memoria Activa hará a la misma hora que el acto central en la AMIA una manifestación frente a la sede de los Tribunales de Buenos Aires bajo la consigna "tenemos memoria, nos falta verdad y justicia", mientras que la agrupación 18J ha convocado a una concentración en horas del mediodía en Plaza de Mayo, frente a la sede del Ejecutivo argentino..
El primer acto de Macri y los compromisos reparatorios con la comunidad judía argentina
Este año, la conmemoración del atentado será la primera durante el nuevo Gobierno de Mauricio Macri, quien asumió la Presidencia argentina en diciembre pasado, tras doce años en el poder de un kirchnerismo que ha sido muy cuestionado por los dirigentes judíos a raíz de un polémico memorando que el Gobierno de Cristina Fernández firmó con Irán en 2013.
Ese acuerdo buscaba, según sus firmantes, tratar de esclarecer el ataque -cuya planificación y ejecución es atribuida al grupo terrorista Hizbulá-, pero finalmente el memorando fue declarado inconstitucional por la Justicia de Argentina.
La controversia arreció cuando el fiscal a cargo del caso AMIA, Alberto Nisman, denunció en enero de 2015 a la entonces presidenta Cristina Fernández (2007-2015) y a otros altos cargos de su Gobierno como presuntos responsables de orquestar un plan para exculpar a los iraníes sindicados como responsables del atentado.
Tras su denuncia, el fiscal, que murió cuatro días después de presentarla en circunstancias aún sin esclarecer, se basaba en el acuerdo suscrito entre Argentina e Irán y que, a su juicio, buscaba encubrir a los sospechosos del atentado a cambio de impulsar el intercambio comercial de granos argentinos por petróleo de Irán.
Sin embargo, esta denuncia fue desestimada definitivamente por la Justicia.
El pasado martes, al visitar la sede de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA, brazo político de la colectividad judía en el país), el ministro de Justicia argentino, Germán Garavano, reconoció que "lamentablemente el Estado ha fallado" en el caso AMIA y dijo que ahora "lo importante es tratar que nunca más vuelva a fallar" el sistema de Justicia.
Garavano destacó que el gobierno de Macri está dando cumplimiento a la ley de reparación a los familiares de las víctimas, ha fortalecido la Unidad Especial de Investigación del Atentado a la AMIA y trabaja para impulsar el juicio en ausencia para hechos de terrorismo.
El atentado contra la AMIA fue el segundo ataque terrorista contra judíos de Argentina, después de que 29 personas murieran en 1992 al explotar una bomba frente a la embajada de Israel en Buenos Aires, atentado también atribuido a Hizbulá.