El asesor presidencial, Steve Bannon.
Reuters
SANTIAGO.- Reconocido por ser la mano derecha del Presidente Donald Trump y por la influencia sobre este mismo en la toma de decisiones, Steve Bannon ha sido catalogado como un asistente político con movimientos descarados para consolidar su poder en la Casa Blanca. Lo que deja en el ambiente una simple pregunta, ¿quién está realmente al mando?
La política estadounidense se encuentra dividida y este ex miembro de Goldman Sachs no queda fuera de la discusión. Bannon confirmó la influencia que tiene en la Casa Blanca y en el Mandatario, después de haber sido el que redactó el discurso de la toma de posesión de Trump y quien insistió en incluir en la reciente orden ejecutiva a los que tuvieran visa permanente en contra del criterio del Departamento de Seguridad Interior, lo que finalmente ocurrió.
Polémico en todos sus ámbitos
Este tipo de actos muestran su firma en los actos que realiza uno de los mandatarios más poderosos del mundo, el cual no estaba fuera del foco de atención previo a su cargo en la casa presidencial. Bannon era el presidente ejecutivo de Breitbart News, un sitio web para la "alt-derecha" como le llama él. El medio online ha sido foco de críticas al igual que su otrora director, con títulos tan controversiales como "La pastilla anticonceptiva las vuelve feas y locas"; "La solución al acoso online es simple: las mujeres deben desconectarse" y "¿Prefieres que tu hijo tenga cáncer o sea feminista?"
Stephen Kevin "Steve" Bannon nació el 27 de noviembre de 1953 en Virginia. Este hijo de padres católicos y demócratas fue voluntario en la Armada, estudió en Harvard Business School y trabajó unos años en Goldman Sachs.
El polémico asesor de Donald Trump ha cargado con el peso de su ideología a través de los años, siendo criticado por sus dichos racistas, machistas y de extrema derecha. Estas actitudes han incidido en sus tres fallidos matrimonios, los cuales han terminado siempre en el divorcio. A pesar de su inhabilidad de mantener una pareja amorosa, Steve sacó algo bueno de sus relaciones, sus tres hijas.
Nunca antes visto
Con uno de los decretos, emitido el sábado, Donald Trump realizó un acto inesperado al nombrar a Bannon como miembro del Consejo de Seguridad Nacional (CSN) junto con los secretarios de Estado, Defensa y otros funcionarios especializados de alto rango.
Pero simultáneamente, descartó a dos oficiales de seguridad nacional: el jefe del Estado Mayor y el director de inteligencia nacional. Nuevamente un hecho inédito, pero con el mismo aspecto en común: la presencia de Steve Bannon.
Los alegatos en contra de su rol en el gobierno no se hicieron esperar y las redes sociales fueron el medio para atacar y criticar esta decisión. Susan Rice, asesora de Seguridad Nacional durante la presidencia de Obama, calificó la decisión de "locura" y también preguntó retóricamente: "¿Para qué necesitamos el asesoramiento del Ejército o Inteligencia?".
La designación de Bannon ha sido duramente criticada por los demócratas y por algunos republicanos. "Es fácil ver por qué el Ku Klux Klan ve a Trump como su candidato cuando Trump nombra a uno de los difusores de los temas y retórica de los supremacistas blancos como su principal consejero", dijo en un comunicado Adam Jentleson, vocero del senador demócrata Harry Reid.
Con todo, y pese a los numerosos cuestionamientos, el nombre de Bannon sigue tomando cada vez más fuerza en la Casa Blanca. Para algunos, se trata del triunfo del conservadurismo y la antesala de lo que se vendrá en los próximos meses. Para otros, podría ser una tragedia.