Miles de iraníes participaron en las marchas convocadas este viernes en la mayoría de las ciudades del país, para apoyar al pueblo palestino frente a la ocupación israelí y rechazar, así, el plan de paz ideado por Estados Unidos.
"Recuperaremos Jerusalén" y "Jerusalén es la eterna capital de Palestina" fueron los lemas más coreados por la multitud, que exigió el fin de la ocupación y de la construcción de asentamientos israelíes en Cisjordania.
En Teherán, la marcha por el llamado
"Día de Al Quds (Jerusalén)" transcurrió por la calle Enghelab, aunque los manifestantes llegaron a pie desde distintos puntos de la ciudad. Durante la marcha, que terminó en la Universidad de Teherán con el rezo musulmán del viernes, los asistentes incluso quemaron banderas de EE.UU. e Israel.
Además, los manifestantes portaron muñecos y caricaturas del Presidente estadounidense, Donald Trump; del secretario de Estado, Mike Pompeo; del Primer Ministro israelí, Benjamín Netanyahu; y de algunos líderes árabes como el rey saudí, Salmán bin Abdelaziz.
El plan de paz para el conflicto palestino-israelí que la Administración de Trump tiene intención de presentar pronto, fue otro blanco principal de las críticas de los participantes en las marchas de Irán. "El acuerdo del siglo no ocurrirá", consignaban las pancartas, en apoyo al boicot al plan expresado por las autoridades palestinas.
El Presidente de Irán, Hassan Rohani, aseguró durante la marcha que el denominado "acuerdo del siglo se convertirá, sin duda, en la quiebra del siglo y no dará resultados".
Por su parte, el líder supremo,
Ali Jamenei, subrayó hace dos días que el Día de Al Quds es "más importante este año debido a los actos de traición de las cohortes estadounidenses en la región" como
Arabia Saudita. Jamenei acusó a este país de intentar que se acepte el acuerdo, pero aseveró que "nunca se hará efectivo".
Trump es un firme defensor de Netanyahu y decidió el año pasado trasladar la Embajada estadounidense de Tel Aviv a Jerusalén, reconociendo esta última ciudad como la capital de Israel.
El "Día de Al Quds" fue establecido en 1979 para pedir la liberación de Palestina y la caída de Israel, y se conmemora el último viernes del mes sagrado de ramadán. Esta vez, ocurre además en medio del incremento de la tensión en las relaciones entre EE.UU. e Irán.