El pasado 3 de junio, la ministra canadiense de Exteriores, Chrystia Freeland, anunció que se suspendieron de manera "temporal" las operaciones diplomáticas con Venezuela, debido a la imposibilidad de mantener de manera leal a su personal diplomático en el país debido a que no podían renovar el visado.
A una semana de este hecho, el Gobierno venezolano comunicó este domingo que interrumpirán sus servicios consulares en Vancouver, Toronto y Montreal.
Además, el Gobierno de Nicolás Maduro catalogó la medida canadiense como un muestra de hostilidad.
"La decisión del Gobierno de Canadá de cerrar temporalmente la Embajada en Caracas, lejos de tratarse de un asunto administrativo, es una decisión política que refleja la hostilidad continuada de ese gobierno hacia Venezuela", dijo el Gobierno venezolano en un comunicado disponible en el sitio de internet de la cancillería.
El gobierno del presidente Nicolás Maduro agregó que Canadá no renovó las credenciales o emisión de nuevas visas diplomáticas a funcionarios venezolanos.
"El Gobierno bolivariano ha actuado en estricto apego al principio de reciprocidad y mantendrá sus decisiones firmes, hasta que las autoridades canadienses recuperen la sindéresis diplomática", agregó en el comunicado.
Canadá, que forma parte del Grupo de Lima, reconoció al líder opositor Juan Guaidó, quien el 23 de enero invocó la Constitución para proclamarse presidente interino y señalar como un fraude los comicios en los que Maduro fue reelegido en mayo del 2018.