Sin vida fue encontrado esta mañana el último de los tres trabajadores bolivianos que aún se mantenía desaparecido tras el derrumbe en la mina San José de Tocopilla, el pasado jueves. Se trata de
Salomón Veizaga (45), quien perdió la vida producto del accidente al igual que su hijo
Denny Veizaga (19), siendo
Leonardo Condori (62) el único sobreviviente.
A través de su cuenta de Twitter, el Presidente de Bolivia, Evo Morales, se refirió al hallazgo y lamentó "mucho la confirmación del fallecimiento del hermano minero Salomón Veizaga".
Tras ello, manifestó la "solidaridad" del Gobierno altiplánico "a su familia", y aseguró que "
brindaremos toda la colaboración que sea necesaria para el traslado de los restos de nuestros dos compatriotas".
El Mandatario del país vecino ya había manifestado ayer, cuando solo se conocía la muerte del Denny Veizaga, que realizaría gestiones para la repatriación de los restos de su connacional, expresando que su administración dispondrá "de inmediato de todo lo necesario para la repatriación de sus restos mortales".
Palabras que más tarde fueron cuestionadas por el ministro chileno de Minería, Baldo Prokurica, quien expuso a Emol que "Evo Morales puso un tuiter no más", afirmando que el Gobierno boliviano le pidió a Chile que se hiciera cargo de las gestiones para el traslado de los restos.
"Cancillería no tiene los recursos para eso. Solo para repatriar el de chilenos que fallecen en el extranjero que no tengan recursos", agregó el secretario de Estado.
Aunque el intendente de Antofagasta, Marco Díaz, explicó ayer que "el compromiso sigue y se mantiene desde el punto de vista social y buscando a ver si a través de presupuesto del Ministerio del Interior o incluso de algún privado que pueda ayudar sin participación nuestra y lograr la repatriación".
