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Fernando de la Rúa visiblemente incómodo y contrariado aparecía en el popular programa
"El Show de Videomatch" la noche del 21 de diciembre de 2000 en la televisión argentina. En esa edición, el entonces Presidente trasandino era recibido por el conductor
Marcelo Tinelli para conversar y marcar un punto de distensión en medio del complicado momento político que vivía el país. El Mandatario pensaba mostrarse como alguien con un gran sentido del humor en el mismo espacio donde lo imitaban y se burlaban de él. Pero
para su desgracia, eso no ocurrió.
Hacía su aparición en el set e, inmediatamente, el Mandatario era increpado por un manifestante que increíblemente burló toda la seguridad y le expresó su ira por la situación de unos reos que se encontraban en huelga de hambre. "Por favor, los presos de La Tablada se están muriendo", decía, ante un descolocado De la Rúa.
Posterior a eso, vino una breve conversación entre el gobernante y Tinelli que estuvo marcada por una serie de errores: se refirió a la esposa del conductor como Laura -cuando en realidad se llama Paula-, confundió el nombre del programa e incluso el canal en el que estaba. Entre medio, el entrevistado lanzaba frases como que
en 2001 "tendremos un año espectacular".
Tanto el conductor del espacio como De la Rúa estaban incómodos, mientras se intentaba hacer un cara a cara entre el Mandatario y el comediante Freddy Villarreal (Figuretti), personificado como el gobernante. "No le sale muy bien, lo han hecho muy narigón. Te felicito por el esfuerzo", se limitó a decir, mientras veía a su "doble" que, ciertamente, no le gustaba.
Para terminar, vino el último "chascarro". Concluida su participación en el programa, el Presidente abandonó el set solo mientras daba vueltas evidentemente confundido, intentando encontrar la salida. Tinelli, en tanto, seguía hablando.
Toda esta aparición causó revuelo en Argentina. Para algunos, se trató de una conspiración del programa para desprestigiar al Mandatario, que ya atravesaba un duro momento, mientras que para otros era la confirmación de que se estaba al frente de un gobernante pusilánime y que no estaba preparado para dirigir un país. Justo un año después, el 21 de diciembre de 2001, De la Rúa abandonaba la Casa Rosada en helicóptero, poniendo fin a su corto mandato de dos años.
El episodio de Videomatch quedó grabado en la mente de Fernando de la Rúa como un momento incómodo que incluso habría sido clave en el fracaso de su gobierno. Así lo hizo saber en una entrevista con Radio Mitre en diciembre de 2003: "Tinelli luego se ha vanagloriado de ese programa, y con ese programa empezó la crisis de mi gobierno", aseguró.
"Había sido invitado para poner término a ese espectáculo lamentable de la mofa", agregó el líder radical, en alusión a la imitación de Villarreal. Sin embargo, eso no ocurrió y, después de eso, según palabras del propio ex Presidente,
"la gente empezó a ver más cercana a la verdad esa imagen de mofa que la que le daba la realidad".
"Tengo sentido del humor, pero el agravio no me gusta. Durante mi gobierno se hizo serio daño a la autoridad presidencial", remarcó.
Posteriormente, en diálogo con La Nación, De la Rúa afirmó que el programa de Tinelli "fue decisivo en la desestabilización de mi gobierno, pero no exclusivo" y aseguró que, tras este episodio, "lo importante es que se debe abrir un debate sobre el rol y la responsabilidad de los medios de comunicación". Este debate, agregó, "hay que darlo porque los medios forman parte de la política y del poder".