El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ordenó una represalia "simétrica" al reciente ensayo efectuado por Estados Unidos con un sistema de misiles idéntico al que tiene desplegado en Rumania y Polonia.
Estados Unidos confirmó la prueba del sistema MK-41, que tuvo lugar el pasado domingo en California, y que según Rusia habría violado las condiciones del Tratado de Armas Nucleares de Alcance Intermedio, un texto del que Estados Unidos se retiró oficialmente este mes.
"Ordeno al Ministerio de Defensa de Rusia, al Ministerio de Exteriores y otros departamentos específicos a analizar el nivel de amenaza creada por las acciones de Estados Unidos nuestro país y
tomar medidas exhaustivas para preparar una respuesta simétrica", dijo el Mandatario tras una reunión con su Consejo de Seguridad.
El Tratado INF no solo se refería a las armas nucleares, sino que prohibía el despliegue de misiles balísticos y de crucero con alcance de entre 500 y 5.500 kilómetros. El ensayo tuvo lugar 18 de agosto, 16 días después de la retirada de Estados Unidos, y fue un éxito: impactó en su objetivo tras volar más allá de los límites configurados en el acuerdo. Washington ha esgrimido que se retiró del pacto porque Rusia lo violó en un primer momento, algo que el Kremlin ha negado tajantemente.
"En lugar de enmendar esta situación intolerable y retomar el cumplimiento del acuerdo, Estados Unidos ha orquestado una campaña de propaganda sobre la supuesta violación de las cláusulas del mismo por parte de Rusia", lamentó Putin en declaraciones recogidas por la agencia oficial de noticias rusa Sputnik.
"Pero a todo el mundo le queda claro ya que el único objetivo era tapar lo que Washington estaba haciendo en contra del acuerdo y que desde un principio tenía la intención de abandonarlo", aseveró.
Para el presidente ruso, el plan de Washington consiste en "zafarse de las restricciones impuestas, quedar con las manos libres para desplegar misiles antes prohibidos en diversas partes del mundo".
Así las cosas, Rusia suspendió también su compromiso con el Tratado INF, en respuesta al país norteamericano, pero al mismo tiempo Putin dejó claro que no desea implicarse en una nueva carrera de armamento, que mantiene sus propuestas de desarme y esperará a que los estadounidenses estén dispuestos a entablar conversaciones al respecto.
"Rusia sigue estando abierta a un diálogo constructivo e igualitario con Estados Unidos para restablecer la confianza y fortalecer la seguridad internacional", afirmó el Mandatario en la misma reunión.