Una periodista rusa murió el miércoles en un bombardeo en Kiev, la capital de Ucrania, según informó The Insider, el medio digital ruso independiente para el que trabajaba.
Oksana Baulina (42) murió tras el disparo de un cohete mientras filmaba los daños causados por el bombardeo de un centro comercial en el noroeste de la capital, según un comunicado del medio independiente.
Otro civil murió y dos personas que acompañaban a la periodista resultaron heridas.
Antes de trabajar para The Insider, Baulina fue productora en Rusia de la
Fundación Anticorrupción, liderada por el líder opositor
Alexei Navalni. Sin embargo, la comunicadora debió salir del país después de que las autoridades calificaran a la agrupación como una "organización extremista", por lo que tuvo que salir del país.
Siguió trabajando para The Insider, sobre temas relacionados con la corrupción. En Ucrania, se empeñaba como corresponsal para el medio y realizó varios reportajes en Kiev y Leópolis (Lviv), detalló este portal, que expresó sus "más profundas condolencias" a su familia y amigos.
"Seguiremos cubriendo la guerra en Ucrania, incluyendo los crímenes de guerra rusos así como los bombardeos a ciegas sobre zonas residenciales", afirmó el medio digital, creado en 2013 por el periodista y activista ruso Roman Dobrokhotov y basado actualmente en Riga, Letonia.
La muerte de esta periodista generó una serie de reacciones dentro del gremio. En ese sentido la Federación Europea e Internacional de Periodistas (EFJ, por sus siglas en inglés) condenó "una vez más el bombardeo de objetivos civiles por parte del ejército ruso".
"Algunos periodistas son atacados deliberadamente con la clara intención de intimidar a toda la profesión, lo que constituye un crimen de guerra. A otros les disparan en áreas residenciales con múltiples víctimas civiles", aseguró el secretario general de la EFJ, Ricardo Gutiérrez, quien hizo un llamado a los reporteros atacados "o a cualquier testigo" que den a conocer estos hechos, ya que "estos crímenes no pueden quedar impunes".
Por su parte, la corresponsal del diario The Guardian en Kiev, Isobel Koshiw, reportó en su cuenta de Twitter que Baulina "pudo haber muerto como resultado de un doble toque, del tipo que Rusia usó en Siria para atacar a los rescatistas y periodistas que llegan a la escena".
Estos ataques de "doble toque" consisten en atacar un punto y volver a disparar al mismo objetivo una vez que llegan los servicios de emergencia, militares o periodistas al lugar.
Al menos seis periodistas murieron en Ucrania desde el inicio de la ofensiva rusa el 24 de febrero, entre ellos tres extranjeros: un camarógrafo franco-irlandés de Fox News y una ucraniana que lo acompañaba, un documentalista estadounidense, dos periodistas ucranianos y Oksana Baulina.