Surcoreanos observan un informe televisivo sobre la situación del covid-19 en Corea del Norte.
AP
El Servicio Nacional de Inteligencia (NIS) surcoreano cree que
la actual ola de covid en Corea del Norte alcanzará su peak entre finales de mayo y principios de junio, y que no todos los casos sospechosos de "fiebres" que está reportando el régimen son debido al coronavirus.
En sesión informativa con el comité parlamentario de inteligencia, representantes del NIS consideraron que la actual ola comenzará a debilitarse en 2-4 semanas y que
muchas de esas "fiebres" (el régimen apenas tiene capacidad para testar)
se deben al sarampión o fiebres tifoideas.
El NIS considera que
ambas enfermedades ya estaban en circulación cuando la subvariante Ómicron BA.2 comenzó a propagarse, tal y como dice el régimen, a final de abril y que por ello se están contabilizando también.
Según los datos facilitados hoy por Corea del Norte,
1,97 millones de norcoreanos (casi el 8% de la población) han contraído en las últimas tres semanas "fiebres".
Esas cifras apuntan a una
transmisión muy rápida del covid en un país en el que la movilidad geográfica está muy reducida por las limitaciones que impone el régimen y la falta de infraestructura.
A su vez,
los fallecimientos (63 hasta ahora) indican una mortalidad excesivamente baja en comparación con los países que han sufrido el embate de Ómicron.
El NIS estima además que el régimen está notificando tantos casos para tranquilizar a la población y hacer saber que está haciendo un seguimiento de los contagios.
En cuanto a sistemas de cuarentena, la inteligencia surcoreana cree que
la mayoría de gente con fiebre es aislada en colegios u otros recintos, y que se les da el alta en cuanto les baja la temperatura.
A su vez, estima que
la vía de entrada del virus aparenta ser la línea férrea entre la ciudad china de Dandong y la norcoreana de Sinuiju, único enlace por tierra que estaba abierto entre ambos países -Pyonyang ordenó su clausura ante el incremento de casos en el país vecino- a través del cual Corea del Norte obtenía buena parte de sus importaciones.
El NIS da por hecho que Pyonyang ha rechazado ya de pleno la ayuda humanitaria de Seúl y Washington, y que ambos serían "los últimos en la lista" de posibles donantes dado el nulo interés norcoreano en reparar lazos.
China y las organizaciones internacionales parecen ser la opción más viable, cree el NIS, que afirma que el régimen considera que podrá controlar la situación si obtiene ayuda de estos dos actores.